El presidente ruso, Vladímir Putin, y su esposa, Ludmila, anunciaron hoy su separación, tras casi 30 años de matrimonio, en unas declaraciones al canal de televisión Rusia 24.
Así es. Ha sido una decisión mutua, respondió tras mirar a su esposa un inquieto Putin, de 60 años, después de asistir al ballet Esmeralda en el Gran Palacio del Kremlin.
Putin, quien confirmaba de esa forma que él y su esposa ya no viven juntos, explicó: Toda mi actividad, todo mi trabajo está relacionado con la esfera pública, con la exposición pública absoluta.
Hay a quien le gusta y a quien no, pero hay gente que no puede compaginarlo de ninguna forma. Ludmila Alexándrovna (patronímico de Ludmila Putina) estuvo al pie del cañón 8 años, ya nueve, añadió, en referencia a los años que ella ha tenido que ejercer el papel de primera dama de Rusia (2000-2008 y 2012-2013).
Y añadió: Yo y Ludmila Alexándrovna seguiremos siendo amigos. Estoy seguro, siempre.
LA PALABRA DE LA ESPOSA Por su parte, Ludmila Putina (55), quien parecía visiblemente más nerviosa que su marido, aseguró: Sí, se puede decir que esto es un divorcio civilizado. Efectivamente, ha sido una decisión común. Nuestro matrimonio ha terminado debido a que prácticamente no nos vemos.
Según las agencias locales, durante el espectáculo ambos se comportaron con naturalidad y tras bajarse al telón manifestaron a la prensa local que el espectáculo les había gustado mucho.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, precisó que la separación aún no ha sido formalizada documentalmente y resaltó que el anuncio del divorcio no había sido preparado de antemano. Peskov también llamó a la prensa a respetar la vida privada del jefe del Estado.
LA PAREJA En los últimos años Putin y su esposa habían hecho contadísimas apariciones públicas (la última de ellas en un acto público durante la ceremonia de investidura como presidente, el 7 de mayo de 2012), lo que disparó los rumores sobre posibles problemas matrimoniales en la pareja presidencial.
Además, la prensa llegó a informar acerca de una posible relación sentimental entre el presidente ruso y la doble campeona olímpica de gimnasia rítmica y diputada oficialista Alina Kabáeva, de 30 años y considerada una de las mujeres más bellas de Rusia.
Vladímir Putin contrajo matrimonio con Ludmila Skrevneva el 28 de julio de 1983, tras lo que convivieron durante varios años en Alemania Oriental, donde el actual líder ruso trabajaba para el KGB soviético. Cuando se conocieron en Leningrado, actual San Petersburgo, de donde es oriundo el jefe del Kremlin, Ludmila Putin, originaria del enclave báltico de Kaliningrado, trabajaba como azafata para una de las aerolíneas soviéticas.
Su primera hija, María, nació en abril de 1985 en Leningrado; mientras la segunda lo hizo en agosto de 1986 en Dresde, Alemania Oriental.