Trípoli (DPA) Las autoridades libias pidieron ayuda internacional para combatir el gran incendio que generó la caída de un misil sobre un depósito de gasolina cerca de la ciudad de Trípoli, producto de los combates entre diversas milicias, según informó el diario local “Libya Herald”.
El medio señala que el gobierno de transición pidió a diversas organizaciones locales y extranjeras el apoyo con efectivos de protección civil y bomberos para apagar el fuego iniciado en el complejo de la empresa petrolera Brega.
El fuego amenaza con extenderse considerablemente, informó el portal de noticias “Al Wasat” citando a fuerzas de seguridad y la Corporación Petrolera Nacional libia.
El misil cayó sobre un tanque que contenía 6,6 millones de litros de gasolina. En total, en el complejo hay almacenados 90 millones de litros. Debido al calor, las autoridades libias temen que puedan explotar otros tanques.
El gobierno llamó a un alto el fuego a las partes en conflicto para que los bomberos puedan combatir el fuego. Las autoridades evacuaron a las personas que viven en un radio de cinco kilómetros del lugar.
En Trípoli, milicias enemigas luchan actualmente por el control del aeropuerto. Estas milicias son los rezagos del levantamiento contra Muamar Gadafi en 2011, cuyo propósito se ha degenerado y ahora protagonizan enfrentamientos que responden a intereses propios.
La situación de inseguridad obligó a que Estados Unidos ordene la evacuación de su personal diplomático a Túnez, el sábado. La medida fue seguida hoy por Austria. Alemania, Francia, España, Reino Unido, Polonia, Austria, Dinamarca y Holanda llamaron también a sus habitantes a abandonar inmediatamente el país.
La cancilerría francesa ordenó desde París que quien permanezca en Libia contacte de inmediato con su embajada en Trípoli. Por otro lado, el gobierno italiano sacó en los últimos días a más de cien ciudadanos del país, todos fueron trasladados a Túnez.
Tailandia también ordenó llevar a un lugar seguro a sus 1.500 ciudadanos que se encuentran en Libia.