La Organización de las Naciones Unidas y Francia pidieron el jueves a las autoridades de la República Centroafricana “sanciones ejemplares” por el linchamiento en público de un hombre en Bangui a manos de soldados centroafricanos.
Los incidentes ocurridos el miércoles en la ceremonia de removilización de las Fuerzas Armadas Centroafricanas (FACA) son “reveladores e inadmisibles” y “deben ser objeto de una investigación y de sanciones ejemplares”, declaró en rueda de prensa el general Babacar Gaye, representante especial de la ONU en la República Centroafricana.
“Hace falta un gran cambio para evitar la violencia ciega, la violencia inútil a la que asistimos hoy”, y que “se traduce en un desgarro del tejido social, con una pérdida de referencias sin precedentes en este país”, añadió.
París condenó también estos “odiosos actos” y pidió “sanciones ejemplares” para los autores, apoyando así “la decisión de la presidenta (centroafricana) Catherine Samba Panza de ordenar una investigación para que los autores sean identificados y respondan de sus actos ante la justicia”, dijo el portavoz del ministerio de Relaciones exteriores, Romain Nadal.
Para la Federación internacional de derechos humanos (FIDH), “la puesta en marcha de un grupo especial de investigación y de instrucción encargado de estos crímenes debe ser una prioridad del nuevo gobierno para trazar una línea roja y que los crímenes no queden impunes”.
En cuanto a la reacción de la fuerza africana Misca, presente en el lugar en el momento del linchamiento, Babacar Gaye afirmó que aunque “el capítulo siete (de la Carta de la ONU, que contempla el uso de la fuerza) autorice llegar al máximo, esto no significa que en cada situación se tenga que llegar inmediatamente a la confrontación a través de las armas”.
El miércoles, ante decenas de testigos, unos militares lincharon a muerte a un hombre sospechoso de ser un soldado que se pasó a la antigua rebelión Seleka.
Los hechos se produjeron al final de una ceremonia oficial en la que la presidenta Catherine Samba Panza celebró el renacimiento de un ejército nacional.