Centenares de personas se lanzaron este domingo a las calles de Bangkok para manifestarse con motivo del 15º aniversario del golpe militar que derrocó al ex primer ministro Thaksin Shinawatra.
Este, un multimillonario que vive en el exilio, continúa siendo una figura destacada en la política del país del sureste asiático desde que los militares destituyeran su gobierno, el 19 de septiembre de 2006.
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Con una gran maqueta de cartón de un tanque como símbolo de la protesta, los participantes en el desfile hicieron sonar los cláxones de sus coches y pidieron la renuncia del actual primer ministro, Prayut Chan-O-Cha, excomandante en jefe del ejército quien llegó al poder mediante otro golpe de Estado en 2014.
“Pasaron ya quince años, pero aún estamos aquí para combatir”, gritaba Nattawut Saikuar, un político cercano durante mucho tiempo a Thaksin, ante un grupo de simpatizantes que hacían flamear banderas donde se leía “Echen a Prayut”.
“No importa cuántos golpes de Estado den, no pueden detenernos (...) No importa la capacidad que tengan sus tanques, no pueden detener a los corazones combativos del pueblo”, añadió.
Un grupo reducido de manifestantes se confrontó con las fuerzas de seguridad que respondieron con el lanzamiento de gases lacrimógenos, alrededor de las 21H00 locales (14H00 GMT).
La manifestación de este domingo forma parte de un movimiento de contestación del gobierno tailandés que empezó en el verano del año pasado.
Tailandia ha sido escenario de más de una docena de golpes de Estado desde el fin de la monarquía absoluta en 1932, perpetrados por militares, con frecuencia con el argumento de proteger a la poderosa familia real.
El fulgurante ascenso al poder de Thaksin fue promovido por los denominados “camisas rojas”, en su mayoría partidarios suyos provenientes de la clase obrera que lo reverencia por sus medidas populistas. Pero es odiado por las élites sociales de Bangkok y el poderoso ejército.