Washington (EFE).
Ante la escalada de violencia generada en la localidad de Ferguson (Missouri) tras la muerte de un joven negro por los disparos de un policía blanco, el gobernador del estado, Jay Nixon, movilizó a la Guardia Nacional para contener las protestas.
Nixon, gobernador de Missouri, ordenó hoy el despliegue de tropas de la milicia del Estado, luego de dos noches de toque de queda con incidentes. Los manifestantes se niegan a abandonar las calles, en protesta por el asesinato de Michael Brown, cuya autopsia determinó en las últimas horas que recibió seis disparos a media distancia, dos de ellos en la cabeza.
La muerte del joven, que según la familia era inocente, provocó disturbios y encendió la tensión racial en Estados Unidos. El fiscal general norteamericano, Eric Holder, había ordenado al Departamento de Justicia realizar una nueva autopsia al cuerpo de Brown “debido a las extraordinarias circunstancias que intervienen en este caso”