Millones de personas en la costa este de Estados Unidos sufrieron los embates de una poderosa tormenta de nieve que se inició el viernes y se extendió durante el fin de semana.
La nieve dejó a muchas ciudades paralizadas y al menos 29 muertos. En algunos estados se registró una caída de nieve de hasta 91 centímetros.
En Washington, los edificios gubernamentales y las escuelas permanecen cerradas.
Según informaron las autoridades, tomará varios días retirar la nieve en zonas residenciales.
En Nueva York –donde se registró la segunda peor nevada desde que comenzaron a tomarse registros en 1869– la mayoría de los servicios de transporte público ya han regresado a la normalidad.