Washington (AP). El sargento Bowe Bergdahl, quien se estaba recuperando en Alemania después de cinco años como prisionero de los talibanes, está de vuelta en Estados Unidos, informó el Pentágono esta mañana.
Un portavoz del Pentágono, el contraalmirante John Kirby, precisó que Bergdahl llegó el viernes por la madrugada al Centro Médico Brooke del Ejército en San Antonio, en un vuelo desde la base aérea de Ramstein.
Se espera que el nativo de Idaho se reúna allí con su familia.
“Nuestra mayor preocupación sigue siendo su salud y bienestar”, dijo el vocero en un comunicado. Añadió que el secretario de Defensa, Chuck Hagel, “confía en que el ejército seguirá garantizando que el sargento Bergdahl reciba los cuidados, el tiempo y el espacio que necesite para completar su recuperación y reintegración”.
Los talibanes capturaron a Bergdahl en Afganistán en junio de 2009 y lo pusieron en libertad el 31 de mayo pasado, como parte de un acuerdo alcanzado por el gobierno del presidente Barack Obama en el que cinco talibanes presos en Guantánamo, Cuba, fueron puestos en libertad.
Kirby agregó que Bergdahl “continuará con la siguiente fase de su proceso de reintegración” en la base de Texas.
El ejército dijo en un comunicado que después de la reintegración de Bergdahl continuará la “investigación exhaustiva de las circunstancias de su desaparición y cautiverio”.
Las autoridades militares estadounidenses han sido muy cautas a la hora de ofrecer detalles sobre el estado del militar, preocupados por no lanzarle bajo los focos mediáticos después de pasar tanto tiempo en cautividad, intentando en todo momento evitar burlas o agravios hacia su persona.
Washington asegura que todavía no ha iniciado una investigación formal que aclare las circunstancias del cautiverio de Bergdahl, de modo que no confirmó ni desmintió si el soldado fue hecho prisionero tras desertar o simplemente tras alejarse sin permiso de su base.
La respuesta a estas preguntas es crucial para saber si el soldado recibirá los más de 300.000 dólares en sueldos atrasados que le corresponden desde su desaparición. Si se determina que fue prisionero de guerra, recibirá otros 300.000 dólares o más, si así lo recomienda y aprueba el alto mando.
Bergdahl fue liberado por los talibanes el 31 de mayo y desde el día posterior estaba en el centro médico alemán de Landstuhl. Muchas voces han criticado a la administración Obama por el canje del soldado por los prisioneros talibanes en Guantánamo, y algunos incluso le han calificado de desertor.