Washington. El rapero Taymor McIntyre, conocido a nivel mundial como Tay-K, fue sentenciado a 55 años de cárcel y una multa de aproximadamente 21.000 dólares por asesinato, aseguró la Oficina del Fiscal de Distrito Criminal del Condado de Tarrant en Estados Unidos.
Según informa El País, el rapero asesinó a un hombre hace tres años, lanzó una canción cuando estaba prófugo de la justicia y durante su escape fue imputado por otros dos delitos: otra muerte y un robo.
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El rapero estadounidense fue sentenciado junto a otros seis por la muerte de Ethan Walker en 2016. La defensa de Tay-K asegura que no fue el rapero quien disparó al hombre, pero de igual manera fue condenado por asesinato y por tres delitos de robo agravado.
Tay-K afrontaba cargos que podían llevarlo a prisión entre 5 a 99 años. Incluso, podría haber sido condenado a cadena perpetua, según señalan los medios estadounidenses.
El hecho sucedió en Texas, cuando Tay-K y otras seis personas intentaban robar droga y dinero a Ethan Walker y a otro sujeto, que terminó herido.
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La novia de la víctima indicó en el juicio que estas personas ingresaron a su hogar para robarle a Walker y terminaron por dispararle y asesinarlo con las manos levantadas.
Sin embargo, el rapero estadounidense manifestó que solo tenía que encargarse del robo y que no estuvo implicado en el asesinato del joven.
En aquel momento, Tay-K tenía 16 años y fue condenado a arresto domiciliario. El rapero continúo su carrera musical y en marzo de 2017 logró escapar de las autoridades de Texas a Nueva Jersey.
Durante su escape, las autoridades estadounidenses lo acusaron de asesinar a otro hombre identificado como Mark Saldivar, de 23 años, durante un enfrentamiento en San Antonio. Además, de estar involucrado en un hecho de robo y agresión a uno de 65 en Arlington.
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Como parte de las investigaciones, las autoridades tomaron en cuenta una canción que Tay-K grabó en Nueva Jersey y la denominó The Race (La Carrera). El videoclip, que estuvo entre los 50 más importantes de Estados Unidos y logró un disco de platino, fue considerado como una prueba condenatoria por posar con un cartel de fugitivo.
Tres meses después de su huida, el rapero Tay-K fue capturado por la policía de Estados Unidos.