Londres. La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, descartó convocar un segundo referéndum sobre el Brexit en Reino Unido, en una rueda de prensa organizada el jueves en Downing Street.
“Por lo que a mí concierne, no habrá un segundo referéndum”, dijo May que horas antes, frente a los diputados británicos, había subrayado el riesgo de que el Brexit no llegase a buen puerto si el parlamento no respalda el proyecto de acuerdo de divorcio alcanzado con la UE.
Horas antes May advirtió de que si el Reino Unido rechaza el principio de acuerdo sobre el Brexit al que ha llegado con Bruselas se enfrenta a “consecuencias” desconocidas.
“Debemos estar unidos para defender el acuerdo que respaldó ayer el Gobierno”, dijo May en una rueda de prensa en su residencia de Downing Street.
Theresa May también se comprometió a salvar su acuerdo del Brexit con la Unión Europea, ya que dijo estar convencida de que es el que mejor defiende los intereses de los votantes.
“¿Voy a ver aprobado esto? Sí”, afirmó May durante una conferencia de prensa. “Voy a hacer mi trabajo para lograr el mejor acuerdo para Reino Unido y el interés nacional”, señaló.
“Creo con cada fibra de mi ser que el camino que he fijado es el correcto para el país y toda nuestra gente”, agregó.
Sobre los miembros de su equipo que han dimitido, Theresa May indicó que comprende que algunos de sus colegas hayan llegado a “conclusiones diferentes” sobre el rumbo que debe seguir el país y les agradeció sus servicios.
Los ministros para el Brexit, Dominc Raab, y de Trabajo y Pensiones, Esther McVey, renunciaron a su cargo hoy por su desacuerdo con el borrador del tratado de salida de la Unión Europea (UE), junto con otros miembros de menor rango del Gobierno Británico.
Si el pacto que ha alcanzado con la Unión Europea no llega a ser ratificado por el Parlamento, “nadie sabe seguro las consecuencias que se derivarán”, alertó la primera ministra conservadora, que hoy compareció ante la Cámara de los Comunes para responder a las preguntas de los diputados sobre el acuerdo.
Theresa May admitió que las negociaciones con la Unión Europea le han obligado a tomar decisiones “difíciles” e “incómodas”, pero subrayó que nunca ha puesto por delante los intereses de su formación, el Partido Conservador, ni los suyos personales.
Al defender que el borrador de acuerdo que han alcanzado los equipos negociadores de ambos lados del canal de la Mancha, la premier subrayó que el tratado permitirá “poner fin a la libre circulación de personas de una vez por todas”.
También servirá para que el Reino Unido “retome el control completo” de sus finanzas y sus leyes.
Preguntada por los periodistas sobre qué hará si el Partido Conservador convoca una moción de confianza sobre su liderazgo, tal como han amenazado algunos diputados “tories”, Theresa May se limitó a responder que “el liderazgo supone tomar las decisiones correctas, no las más fáciles”.
La jefa de Gobierno, que descartó esta mañana ante los diputados que se haya planteado abandonar el cargo, recalcó en la rueda de prensa de esta tarde que continuará “trabajando” para alcanzar el mejor Brexit posible para el Reino Unido.
Fuente: Reuters / EFE