París. El fundador del ultraderechista Frente Nacional (FN) francés, Jean Marie Le Pen, expulsado recientemente de forma provisional de ese partido, anunció hoy que planea crear “una formación” que sirva de “paracaídas contra el desastre” pero que no competirá con la que fundó en 1972.Seguir a @Mundo_ECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
“No voy a crear otro partido. Voy a crear una formación que no será competidora del FN. Será una especie de paracaídas contra el desastre”, declaró en una entrevista concedida a la emisora “Radio Courtoisie”.Le Pen aseguró que esa formación integrará a “todos los indignados” con la línea política del FN, “que son numerosos”, y avanzó que espera que contribuya a restablecer la seguida por ese partido “desde hace décadas”.El líder histórico de la ultraderecha francesa, que fue suspendido de militancia en el FN el pasado 4 de mayo en respuesta a unos comentarios provocadores, subrayó que seguirá luchando “mientras tenga fuerza” y dijo estar “triste” por la batalla interna desencadenada en el partido que ahora dirige su hija Marine.“No me dejaré hacer. Creo que hace falta restablecer en el movimiento una verdadera democracia”, dijo Le Pen, quien insistió en que se deben corregir los errores cometidos en su propio campo pero animó a la gente a votar por el FN.El castigo decretado por el buró ejecutivo del FN, la máxima instancia de dirección, se produjo como consecuencia de su última salida de tono, en la que aseguró en la revista ultraderechista “Rivarol” que las cámaras de gas son un “detalle” de la Historia y que el mariscal Pétain, colaboracionista con los nazis, “no fue un traidor”.A medio año de unas elecciones regionales en las que el Frente Nacional espera cosechar grandes resultados, su actual presidenta, Marine Le Pen, se enfrentó con la mayor crisis interna del partido en su historia, en la que el fundador dijo haber sido “desautorizado”.“Creo que Marine tiene grandes valores, grandes cualidades”, admitió hoy Le Pen, que pese a todo no escondió en sus declaraciones las críticas contra su hija, quien asumió las riendas del partido en enero del 2011.Si la actual presidenta “recupera el camino de la libertad de pensamiento, y si es capaz de tomar otras responsabilidades que las sugeridas por malos consejeros, creo que todo es posible”, dijo en referencia a las elecciones presidenciales del 2017, fecha para la que apeló a que “el campo nacional esté unido” en su batalla contra socialistas y conservadores.
Fuente: EFE