Londres. El presidente de la cámara baja del Parlamento británico, John Bercow, ha causado una gran controversia al citar una regla de hace 400 años para advertir que el Gobierno de Theresa May no puede someter otra vez a votación el acuerdo del Brexit si no hay modificaciones significativas en su propuesta.
May esperaba someter a votación por tercera vez su pacto negociado con Bruselas antes de que los otros 27 miembros de la Unión Europea (UE) decidan en la cumbre de esta semana si autorizan por unanimidad prorrogar el Brexit (salida del Reino Unido del bloque comunitario) más allá de este 29 de marzo.
Está obligado a mantener el orden en los debates en la cámara baja al darle la palabra a un diputado para que exponga sus argumentos y que el resto escuche sin interrumpir. Son ya famosos sus estridentes gritos de “Orden, orden”.
Bercow es la máxima autoridad en la Cámara de los Comunes y tiene la potestad de asegurar que todos los diputados sigan las reglas parlamentarias, como mandarlos callar, obligar a un diputado a retirar un comentario si lo considera ofensivo o suspender una sesión si considera que hay demasiado desorden.
Además, puede suspender a un diputado si evalúa que ha desobedecido al presidente deliberadamente.
Sí. El presidente es un diputado más y está obligado a atender las labores de su circunscripción. No obstante, cuando es elegido está forzado a mantenerse al margen de los asuntos políticos de su partido, en este caso el Conservador, lo que le obliga a ser imparcial.
Bercow, diputado por la circunscripción inglesa de Buckingham, fue elegido en 2009 después de una votación secreta entre los diputados de la cámara baja.
El presidente ha citado un libro de reglas denominado “Erskine May”, un texto autorizado de legislación parlamentaria y procedimiento. De esta manera, Bercow citó una costumbre que data de 1604 para argumentar ayer que una moción derrotada no puede ser sometida a otra votación durante el actual curso parlamentario. Fuente: EFE