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Washington, DPA
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se mostró hoy profundamente preocupada por “el deterioro del derecho a la libertad de expresión en Venezuela”.
Esta oficina de la CIDH hizo un llamado al gobierno de Nicolás Maduro para que cumpla “los más estrictos estándares internacionales en materia de libertad de expresión”, de forma que se les garantice a los periodistas y medios de comunicación “ejercer, sin intervenciones indebidas, el derecho pleno a la libertad de expresión, así como su derecho al debido proceso”.
La Relatoría pidió al Gobierno Venezolano que “investigue las razones que han conducido al bloqueo de los portales y aplicaciones de medios de comunicación” y adopte las medidas necesarias para restablecer el acceso, “de conformidad con las obligaciones internacionales en materia de Internet”.
Este organismo con sede en Washington recomienda también que se evite “el uso de medios directos o indirectos para impedir la circulación de opiniones críticas o denuncias contra autoridades del gobierno”.
La Relatoría lamentó “la continua estigmatización por parte de altos funcionarios públicos de medios de comunicación y periodistas críticos, los procesos sancionatorios y los despidos de comunicadores, así como los presuntos bloqueos de la señal de Internet de medios de comunicación”.
Esta oficina de la CIDH recordó que el pasado 18 de setiembre, el presidente Maduro acusó de “terrorismo psicológico” y “terrorismo mediático” a varios medios de comunicación - entre ellos, el diario “El Nuevo Herald” y las cadenas de televisión CNN En Español y NTN24- por haber informado sobre las muertes ocurridas en el Hospital Central de Maracay.
La Relatoría recordó que Maduro hizo un llamamiento a la justicia venezolana para que se tomasen medidas contra dichos medios, para “castigar” a todos los responsables y “perseguir al terrorismo”.
RAYMA Y “EL UNIVERSAL”
Este organismo denunció que, por otro lado, la caricaturista Rayma Suprani fue despedida recientemente del diario “El Universal” presuntamente por haber publicado una viñeta “en la que ilustra la situación del sector salud del país empleando, como parte de la viñeta, la firma del fallecido ex presidente Hugo Chávez”.
La Relatoría señala que el despido de Suprani y de 20 periodistas o columnistas de opinión más de ese diario se ha producido tras el cambio de propietarios de “El Universal” el pasado mes de julio.
EL CASO NTN24
Asimismo, quedó interrumpido el acceso desde Venezuela a las páginas de Internet del canal internacional de noticias NTN24, muy crítico con el gobierno de Maduro, y se inhabilitó su señal de streaming en vivo a través de Internet.
NTN24 ya había sido anteriormente víctima de la censura en Venezuela, después de que el pasado 12 de febrero el presidente Maduro ordenara sacar a este canal de televisión colombiano de la parrilla de programación de todas las cable-operadoras del país, después de que la cadena informara de las manifestaciones de la oposición venezolana.
La Relatoría recordó que todos estos hechos han ocurrido en el contexto de “una dramática escasez de papel prensa”, que habría provocado que “al menos doce publicaciones dejaran de circular de manera temporal o definitiva y a que al menos 18 medios tuvieran que reducir sustancialmente su paginación”.
Además en Venezuela se ha llevado a cabo procesos administrativos y penales contra “medios críticos del gobierno”. La Relatoría cita el caso de los directivos y un columnista del periódico “TalCual” por la publicación de un artículo que habría ofendido a un funcionario público y por el que los demandados podrían ser condenados “a penas de prisión de cuatro años y al pago de multas millonarias”.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión es una oficina creada por la CIDH, con el fin de defender el derecho a la libertad de pensamiento y expresión en el hemisferio.
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