“Ideas prácticas para enfrentar la guerra económica desde la casa: criar pollos en el patio solo toma seis semanas”. Esta es la última recomendación del chavismo para enfrentar la escasez de alimentos y de productos que padece Venezuela y que en los últimos 12 meses se ha agudizado a tal punto que hoy en 22 de cada 100 comercios de Caracas faltan uno o varios de los productos que los consumidores buscan, según reconoció recientemente el Banco Central de Venezuela (BCV).
La propuesta la hizo el diputado oficialista José Ávila, quien a través de su cuenta de Twitter planteó: “En estos momentos de ataque al abastecimiento, retomemos con fuerza la idea de la agricultura familiar”. El parlamentario, quien generó revuelo en las redes sociales, desempolvó así una iniciativa que Hugo Chávez impulsó a inicios de su mandato, la de los huertos urbanos y los llamados “gallineros verticales”.
Pero criar pollos en el jardín no es la única medida inusual. Desde noviembre el gobierno de Nicolás Maduro ha emprendido una “ofensiva” contra empresarios y comerciantes a los que ha acusado de pretender derrocarlo induciendo un alza de los precios y generando el desabastecimiento. Esa ofensiva se ha sustentado en inspecciones a establecimientos a cuyos propietarios ha forzado a rebajar sus precios no sin detener a por lo menos un centenar.
El fin de semana pasado el mandatario retomó este tipo de medidas, luego de que entrara en vigencia la Ley de Precios y Costos Justos, con la cual fijó en 30% la ganancia máxima que cualquier empresario o comerciante puede tener y castiga con hasta 14 años de cárcel a quienes acaparen productos o los vendan por encima de los precios fijados por el Ejecutivo.
Como si esas sanciones no fueran suficientes, el martes Maduro lanzó la siguiente advertencia: “Si el lunes que viene encontramos unidades económicas o empresas violando la ley, voy a tomar las medidas más radicales que haya que tomar […] voy a ir a fondo, no me subestimen. Si hay que expropiar, vamos a expropiar a quien tengamos que hacerlo para defender la economía del país”.
Así no se gobiernaAunque el director de la consultora Econoanalítica, Asdrúbal Oliveros, afirmó que tanto la propuesta del diputado Ávila como la estrategia militarista del gobierno eran “un chiste que no merecen ningún comentario”, agregó que “estas medidas no le pondrán fin ni al desabastecimiento ni a la inflación, pues para ello se necesita un cambio de política económica”.
En conversación con El Comercio, el director de Econoanalítica precisó que era necesario que las autoridades adoptasen tres medidas:
“Hay que revisar los controles de precios, pues hay muchos productos que mantienen sus precios congelados desde hace mucho tiempo y no se cubre el costo de su producción. También hay que revisar la paridad cambiaria, la cual hace que sea muy barato importar y desestimula la producción interna. Y, por último, hay que revisar la situación de las empresas públicas, pues ellas no están produciendo como deberían. Todo lo demás es show”.