Washington, DPA
Los servicios secretos de Estados Unidos no cuentan por ahora con pruebas de una participación directa de Rusia en el derribo de un avión de pasajeros en el este de Ucrania, informaron hoy el canal NBC y otros medios locales basándose en fuentes de inteligencia.
Funcionarios que hablaron en condición de anonimato afirmaron que el vuelo de Malaysia Airlines MH17 probablemente fue derribado por rebeldes separatistas prorrusos con un misil tierra-aire del tipo SA-11 y consideraron que el derribo probablemente se haya debido más bien a un error.
Además, dijeron que por ahora es difícil saber quién es responsable de la muerte de las 298 personas que se encontraban a bordo del Boeing 777-200.
El viceasesor de seguridad estadounidense Ben Rhodes anunció a la cadena estadounidense CNN que habrá profundas investigaciones.
“Seguimos trabajando para determinar si hubo un vínculo directo, si hubo rusos en el lugar, si ellos entrenaron a estos separatistas”, señaló Rhodes.
“The Wall Street Journal” indicó que varios funcionarios de los servicios secretos le mostraron pruebas a determinados periodistas de que el misil que derribó al avión partió de una zona controlada por los separatistas.
De todas formas, los funcionarios consideraron que Moscú ayudó a establecer las condiciones para que se diera este incidente al suministrar armas y entrenar a los rebeldes.