- Lee aquí el Editorial de hoy martes 6 de febrero: “Invitado de horror”
No me refiero a un congreso de vulcanólogos, sino al XIV Congreso Nacional de Derecho Constitucional que hace dos meses se realizó en la histórica y hermosa Ciudad Blanca. Participaron 1.000 personas, entre magistrados, académicos, abogados de diversas especialidades y delegaciones estudiantiles procedentes de distintas regiones del país.
El evento se llevó a cabo en un gran auditorio de la acogedora Universidad Católica Santa María, fundada hace 62 años y que, en los últimos años, ha tenido un progreso extraordinario en el desarrollo de las disciplinas que ofrece, demostrando así que fuera de la capital también tenemos universidades privadas y públicas de calidad; claro está, dentro de los estándares de medición nacionales.
El congreso se denominó “A 30 años de la vigencia de la Constitución de 1993 y el Bicentenario de la de la Constitución Peruana de 1823″. Fue un evento en el que se analizaron los alcances, logros y defectos de la Constitución que nos rige, pero donde también se recordó el valor histórico, político y jurídico de la que nos rigió hace 200 años, todavía en el contexto de un país dividido entre realistas e independentistas, posiciones encontradas que finalmente se definieron en la Batalla de Ayacucho.
El congreso tuvo dos aditivos especiales con relación a los anteriores: no solo la importante presencia de destacados juristas de otras naciones latinoamericanas que con anterioridad han participado en otros congresos nacionales, sino también el justo homenaje que se le rindió a Domingo García Belaunde, destacado docente y promotor del Derecho Constitucional en el país que tuvo la iniciativa de fundar la Asociación Peruana de Derecho Constitucional el 29 de abril de 1996, siendo su primer presidente. En esta tarea lo acompañamos en la directiva con Miguel Vilcapoma Ignacio y Edgar Carpio Marcos. Esta asociación le dio institucionalidad al posterior desarrollo del Derecho Constitucional peruano. Con el tiempo fueron incorporándose constitucionalistas de todo el país que han contribuido a la fecha con una pluralidad de temas que constituyen el contenido de esta disciplina. Investigaciones, tratados en varios tomos, introducciones y obras altamente especializadas.
Sobre el aporte de García Belaunde al Derecho Constitucional, Francisco Eguiguren Praelli, expresidente de la asociación, destacó que gracias a su esfuerzo existen constitucionalistas en el Perú y también resaltó el valor de su trabajo en la lucha por fortalecer los derechos fundamentales. En representación de los constitucionalistas de otros países, el jurista mexicano Eduardo Ferrer Mac-Gregor, expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, se refirió a la sólida formación humanista de Domingo García Belaunde y a su aporte intelectual al constitucionalismo peruano. No cabe duda de que el homenajeado marcó un hito entre el constitucionalismo peruano del siglo XX, que llamo clásico, donde podemos mencionar a destacados exponentes en esta materia como Raúl Ferrero Rebagliati, Darío Herrera Paulsen y José Pareja Paz Soldán, y el moderno de este siglo, cuya fecha germinal se inicia a partir de los años 70 del siglo pasado.
El segundo caso a destacar es que, si bien es cierto que muchos limeños tenemos raíces provincianas, por primera vez en la historia de la Asociación Peruana de Derecho Constitucional hay dos autoridades netamente provincianas definitivas: los doctores Jorge Luis Cáceres de Arequipa, presidente y actual vicerrector académico de esta universidad marianista, y el sullanense Gerardo Eto Cruz, docente de la Universidad Nacional de Trujillo y exmagistrado del Tribunal Constitucional, como primer vicepresidente. Y sobre la Constitución que nos rige, ¿qué se dijo? Las palabras pronunciadas por Víctor García Toma, también exmagistrado constitucional y anterior presidente de la asociación, explican las razones de su vigencia: “Es necesario entender que esta carta nació deslegitimada y débil políticamente, pero a lo largo de estas tres décadas se fue consolidando dado que sufrió diversas reformas”. Y necesita aún más, así lo creo.