Hoy se conmemora el segundo aniversario del armisticio de la Gran Guerra y se celebró en la ciudad de Verdún. Ni el frío ni la larga espera fueron motivo para atenuar el patriotismo de los habitantes de esa ciudad que asistieron a los funerales vigiliados de ocho soldados desconocidos, caídos durante la heroica defensa de esa fortaleza. Los féretros literalmente habían desaparecido bajo una montaña de flores llevadas por peregrinos de toda Francia. Desde hace dos días una larguísima fila de vehículos y un mar de peatones confluyeron hacia esa valerosa ciudad.
H.L.M.