Ayer, El Comercio pudo hacer una visita a las muy avanzadas obras del hotel Bolívar que se viene levantando aceleradamente. Todos los materiales son de primerísima clase y la gran mayoría de ellos, importados. Como los grandes establecimientos de esa clase en el mundo, también tendrá locales de lujo para ofrecer productos nacionales a los turistas. Los salones impresionan por su tamaño y por sus sólidas y bellas columnas. El lujo está en todas partes, pero con buen gusto. Pudimos ver parte del mobiliario totalmente importado de Inglaterra. Realmente Lima lo merece. H.L.M.