Si hoy lunes 13 se concreta la participación de la selección en el Mundial de Qatar, la economía de las familias peruanas podría ganar, pero también perder mucho. Eso dependiendo de en qué sector estemos y de si participamos trabajando más, o descansando. Veamos.
¿Cuál sería el impacto del Mundial en el PBI? Si fuéramos grandes generadores de productos ligados al fútbol, la participación del equipo peruano haría crecer el PBI. No siendo ese el caso, la lógica y las estadísticas de años anteriores indican que el PBI podría redistribuirse por sectores, pero no variar mucho el total. El encuentro entre el PBI peruano y el Mundial terminaría en empate.
¿Qué sectores podrían crecer? Entre otros, se prevé crecimiento para dos sectores muy afectados por las crisis recientes, el textil y el gastronómico. Crecerá así la producción de camisetas y de toda la parafernalia textil que usan los aficionados para ver los partidos. Y por el lado gastronómico, bares, cebicherías, restaurantes y conexos tendrán un movimiento que no veían desde hace tres años. No se gana, pero algunos jugadores suben su cotización.
¿Quiénes podrían perder? Al no crecer el PBI, debe entenderse que lo gastado en televisores, camisetas o cebiches, disminuirá el gasto en otros sectores, sobre todo los de inversión mayor, y también el consumo de diversión y ropa en momentos posteriores. Los menos afectados serían los alimentos, que se priorizan sobre el resto. Unos salen y otros entran, pero siempre son 11 en el equipo.
¿Y podría el Mundial ser más bien dañino para nuestra economía? Sí, especialmente si para ver los partidos disminuimos el trabajo y la producción, como ocurre cuando se declaran días no laborables, como el de hoy lunes. Aun si solo parase el sector público, afectaría a las muchas actividades productivas que necesitan de su concurso. Cada día de paro es un autogol que el gobierno le mete al país.
Pero, ¿se podría aprovechar para hacer crecer la economía? Ciertamente, si la emoción por un exitoso desempeño de la selección se orienta a mejorar el estado anímico y estimular la inversión, que hoy están al nivel de las épocas de hiperinflación y terrorismo. Si aprovechamos la alegría nacional para generar más trabajo y productividad, el país ganaría 3 a 0.
En fin, ¿ganará o perderá el Perú con el Mundial de Fútbol? Todo dependerá de cómo enfrentemos el partido de la economía, donde ya tenemos el hándicap de un gobierno que cree que el fútbol y el trabajo productivo son enemigos y no complementarios. Porque, si un buen manejo del Mundial podría ser muy bueno para todos, uno mal administrado podría propinarle una goleada al país. Les deseo una gran semana.