El Ministerio de Cultura, mediante el Viceministerio de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales, declaró a los conocimientos, prácticas y rituales asociados a la producción alfarera de Huarguesh o Huarguish y Punchao Chico como Patrimonio Cultural de la Nación.
Según se precisó en la resolución viceministerial N° 183-2015, publicada hoy en El Peruano, el distrito de Quisqui, donde se ubican los comunidades campesinas de Huarguesh y Punchao Chico (provincia y departamento de Huánuco) han sido el territorio en el que se asentaron diversos pueblos prehispánicos como los Chupachos del Valle del Pillco.
“Ellos se caracterizaron por su habilidad alfarera, la cual trascendió la hegemonía inca y fue valorada por los españoles una vez fundada la ciudad de Huánuco, en 1539”, se precisa en el documento.
Además de la técnica para manejar la alfarería y las herramientas empleadas, otro aspecto que destacó el Viceministerio de Patrimonio Cultural fue el empleo de tres tipos de tierra: una denominada raku, de textura suave, arcillosa y elástica cuando está húmeda; otra llamada ushia o cuerpo, más seca y áspera; y finalmente el muki, que es de color rojizo y se usa como pintura antes poner las piezas al horno.