A solo 15 días de que concluya la gestión de los 25 presidentes regionales que fueron elegidos a fines del 2010, seis de estas autoridades –casi la cuarta parte– no terminarán la labor que le encomendó la mayoría de los electores por estar vinculados con hechos irregulares.
Y es que los presuntos actos de corrupción llevaron a prisión a tres de ellos, otros dos se encuentran prófugos de la justicia y un sexto fue inhabilitado para asumir cargos públicos.
El cajamarquino Gregorio Santos, uno de los principales opositores a las políticas del Gobierno Central, y el ancashino César Álvarez, conocido por el Caso ‘La Centralita’, fueron dos de los líderes que recibieron prisión preventiva. Similar es el caso del presidente regional de Pasco, Kléver Meléndez, quien es acusado de favorecer a empresas en licitaciones públicas.
En tanto, el presidente de Tumbes, Gerardo Viñas, y su homólogo de Madre de Dios, José Aguirre, están como no habidos, luego de que el Poder Judicial ordenara que fueran recluidos, de manera preventiva, en centros penitenciarios, al existir indicios de su participación en crímenes y actos de corrupción, respectivamente.
Cusco tampoco verá culminada la gestión del político que ganó los comicios regionales de hace cuatro años, ya que Jorge Acurio Tito fue condenado a cuatro años de prisión suspendida y tres años de inhabilitación en el cargo de presidente regional, al haber sido hallado culpable del delito de colusión y negociación incompatible en agravio del Estado.
Otros casosUna situación distinta se dio en San Martín, donde César Villanueva renunció al cargo para liderar por casi cuatro meses la Presidencia del Consejo de Ministros del gobierno de Ollanta Humala. En diciembre del 2013, el Consejo Regional de San Martín aprobó su vacancia.
Quien sí terminará su período, pese a tener una investigación en su contra por el delito de colusión, es Iván Vásquez, presidente de Loreto. Estuvo prófugo cinco días, se entregó a la justicia el pasado 23 de julio y purgó prisión apenas un día, tras recibir comparecencia.
“Este panorama trae la necesidad de que los partidos nacionales recuperen su liderazgo”, opina el ex jefe de la ONPE, Fernando Tuesta.
El especialista en narcotráfico y terrorismo Rubén Vargas considera que los futuros aspirantes a las presidencias regionales, además de demostrar honestidad, deben conocer la realidad regional y rodearse de expertos en gestión pública. Coincide con ello el politólogo Eduardo Dargent, quien sostiene que los aspirantes a las regiones necesitan aprender cómo se mueve el Estado para una gestión exitosa.
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