La Junta Directiva del Sindicato de Trabajadores de la Defensoría del Pueblo lamentó y expresó su protesta ante las declaraciones que dio esta mañana a RPP el titular de la entidad, Walter Gutiérrez.
Gutiérrez manifestó esta mañana que la no renovación de contratos a 40 trabajadores del régimen de Contrato Administrativo de Servicios (CAS) se debió a un tema de presupuesto, y que incluso se necesita más. “Puedo garantizar que el clima laboral en la Defensoría ha regresado a su nivel”, expresó también.
Al respecto, mediante un comunicado, el sindicato indicó que en la instalación de la mesa de diálogo realizada ayer se acordó y suscribió un acta en el que los representantes de la alta dirección se comprometieron a dar respuesta a los trabajadores sobre el pedido de renovación de los contratos CAS que non fueron renovados.
En la reunión se acordó que dicha respuesta será comunicada en la reunión de mañana jueves a las 3 p.m.
“Lamentamos que el defensor del Pueblo haya desautorizado a sus representantes ante dicha instancia de diálogo al anunciar que el caso de los 40 trabajadores CAS está cerrado por razones presupuestarias”, señala el comunicado.
También lamenta que Gutiérrez haya dicho que el clima laboral se ha normalizado.
“Los trabajadores manifestamos públicamente nuestra indignación frente a lo que consideramos una falta de respeto no solo contra los trabajadores, sino también contra sus propios representantes ante la mesa de diálogo”, agrega.
Finalmente, los trabajadores adelantaron que en la reunión de la mesa de diálogo, a realizarse mañana, dejarán sentada su protesta frente a lo que consideran “una violación a la conducta y espíritu defensorial por el que la institución siempre se ha caracterizado”.
—Jefes de regiones se pronuncian—El martes, jefes de oficinas defensoriales de San Martín, Loreto, Ayacucho, Amazonas, Ica, Huánuco y Áncash enviaron un oficio a José Élice, primer adjunto de la Defensoría, expresando que los últimos acontecimientos en la entidad representan “un cisma laboral innecesario”. Asimsimo, señalaron su preocupación “por el debilitamiento de los equipos de trabajo defensorial” y recomendaron mejorar los canales de comunicación interna y la transparencia en las decisiones administrativas.
Aunque saludaron la conformación de una comisión de diálogo, señalaron que la situación “afecta nuestra legitimidad institucional, así como el trabajo en todos los niveles de actuación, pues debilita la capacidad de intervención defensorial frente a conflictos sociales, especialmente laborales, que nuestra acción defensorial suele ayudar a resolver en base a argumentos técnicos, éticos y jurídicos”.
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Walter Gutiérrez: “El principal capital de la Defensoría del Pueblo son los trabajadores” ► https://t.co/k4NAN1nPvj pic.twitter.com/zEvqhQ7SrK— Política El Comercio (@Politica_ECpe) 28 de diciembre de 2016