¿Pasadas las elecciones municipales y regionales, sentiremos el aroma de las presidenciales?Estas elecciones permitirán ver cómo les va a Castañeda, Acuña y Villarán, que son los tres que podrían participar en el 2016. Habría que preguntarle a Castañeda si descarta una postulación para la presidencia o si utiliza la alcaldía como un trampolín. Habrá un interregno hasta el primer semestre del 2015. Es la última oportunidad para hacer reformas legislativas y que se aprueben normas para el país. La campaña presidencial realmente arranca dentro de un año, en setiembre del 2015.
¿Las cifras que tienen Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski en las encuestas no dicen nada?Lo de Keiko creo que sí dice. Tiene un voto duro importante de cerca de 20%. Es mayor de lo que tenía hace cinco años en víspera de la campaña en la que ganó Humala. Las cifras de Keiko sí indican que ella será una probable contendora en la segunda vuelta en el 2016. Además porque tiene mucho voto en el interior del país, incluso en el sector rural. Es la única que está fuerte ahí. PPK tiene un voto interesante, básicamente de clases medias urbanas. Será un contendor interesante, pero su pase a la segunda vuelta es dudoso porque está la gran incógnita de Alan García.
¿Está golpeado por las acusaciones del oficialismo?Está muy golpeado por el tema de ‘narcoindultos’, pero es un tremendo candidato, una persona sumamente hábil. Ha salido bien librado de las acusaciones pero su imagen política está dañada. Sin embargo, Alan García es quien mejor puede capitalizar el desgaste del gobierno, la desaceleración económica, porque en su mandato la economía creció 6% y 7% y García tiene una memoria envidiable, así que nos va a recitar durante la campaña todas y cada una de las obras que hizo en cada lugar del Perú. El gran desafío para las próximas elecciones es quién va a ocupar el espacio de la seguridad ciudadana. La imagen de sheriff de Daniel Urresti está caminando bien. ¿Podrán Keiko o PPK ocupar ese espacio en el 2016 o Alan tiene mayor capacidad para ello por su estilo personal?
¿El incremento discreto de la aprobación presidencial es por el ministro Daniel Urresti?Ciertamente es un factor clave. Ha dinamizado la gestión, vamos a ver cuánto dura. Dependerá de que no hable del yeso ni de cifras falsas. Ayuda también el estilo dialogante de Ana Jara. Pero no nos olvidemos de que dos terceras partes de la población desaprueban al presidente. Subió de veintitantos a veintitantos.
El factor Nadine Heredia sigue complicando la figura presidencial.Ayuda que tenga un perfil bajo. Cada vez que sale y declara, debilita a Humala y se piensa en la reelección conyugal.
¿Es seguro que no será candidata?Me parece que sus declaraciones fueron claras y convincentes. Además, creo que es consciente de que no tiene posibilidades. El desgaste del gobierno es tal que correría el riesgo de hacer un papelón. Faltaría a su palabra, se desdiría para quedar como tercera o cuarta. Los partidos que dejan el gobierno tienen bajísima votación, lo ocurrido con Toledo y García es ilustrativo. Humala tiene la misma aprobación que ellos en su época. Si hace un buen papel, Ana Jara sería la candidata natural y ser llamada al sacrificio, como Martha Chávez en su momento.
¿Inquieta la desaceleración económica?Sí. La mitad de esa caída es responsabilidad de la gestión del gobierno. En eso hay consenso. La sensación ciudadana es que el gobierno tiene cosas por hacer y que no está haciendo nada. Si no logra remontar, saldrá más ‘chamusqueado’.