El titular de Salud y vicealmirante en retiro, Fernando D'Alessio, comenta los problemas que encontró en el sector desde que inició su gestión a mediados de setiembre. También explica las medidas y los planes que tiene para reestructurarlo.
— Usted viene de Centrum. Entonces ha venido con la misión de ordenar administrativamente el sector, reestructurarlo para que sea eficiente. ¿Cómo va a hacerlo?Primero que nada, soy espada de honor de mi promoción. Me gradué cumpliendo 20. Estuve 35 años como oficial, llegué al grado más alto de vicealmirante. En la Marina ocupé cargos operativos y además dirigí todas las escuelas de la Marina: Escuela Naval, Escuela de Guerra, centro táctico, escuela de calificación de oficiales. Pasé al retiro por 40 años de servicio y al día siguiente asumí, a pedido del rector de la Universidad Católica, el proyecto Centrum. La Católica no tenía una escuela de negocios. Y comencé de cero. Estuve 18 años y Centrum es ahora una de las 100 mejores escuelas de negocio del mundo. A los 10 años ya teníamos triple acreditación. Y entonces el presidente Pedro Pablo Kuczynski me llamó y me dijo: “Almirante, quiero que sea usted ministro de Salud…, quiero alguien que no sea médico, no tengo nada contra los médicos, pero lo que necesita [el sector] Salud en este momento es una reestructuración y usted es un especialista en estrategia, en liderazgo, en sistemas integrados, logísticos, cadenas de suministros, reingenierías”. No lo pensé dos veces. Tengo ya cinco semanas en el cargo.
— Bueno, ¿qué es lo que está haciendo entonces para reestructurar, para volver eficiente el sector?El ministro de Salud tiene en su jurisdicción 18 hospitales y 8 institutos de Lima Metropolitana y más postas médicas. Si vamos afuera de Lima, en las 25 regiones todos los hospitales y los directores regionales dependen del gobernador regional. Del presupuesto central, el Ministerio de Economía y Finanzas le transfiere directamente a las regiones, y el Minsa también le transfiere. Pero ellos nombran a su director regional, a sus directores de hospitales y al final, pues, no tenemos un control cercano sobre ellos. Entonces hemos presentado al Congreso un proyecto de ley que tiene la anuencia de muchos congresistas que son médicos, que son miembros de la Comisión de Salud, para que la rectoría de los hospitales fuera de Lima regrese al Ministerio de Salud.
— ¿Eso qué implica?Que nosotros designaríamos a los directores regionales de Salud y con él nombraríamos a los directores de los hospitales y ya el control estaría bajo el Minsa, tanto la parte médica como la parte administrativa, que la tiene el director regional. El director regional dependería del ministerio, pero con esto no se quiere dar marcha atrás a la descentralización como muchos dicen. El tema es que en este momento muchos hospitales tienen carencias, no manejan las cosas bien. El segundo paso es regresar a la atención primaria. ¿Qué pasa en este momento? Si a mí me duele la cabeza, me voy a un hospital. Si alguien está mal del estómago, voy al hospital.
— Yo escucho hablar de eso desde hace décadas. Nunca se lleva a cabo. ¿Cómo va a hacer usted? Con las Diris [Dirección de Redes Integradas de Salud]. En Lima hay cuatro Diris: norte, centro, sur y este. Entonces hemos puesto dos directores en cada Diris: uno administrativo y uno médico. En algunos casos son marinos, pero todos son MBA, son magísteres. Tenemos que educar a la gente. La gente dice: “En el hospital me van a atender mejor. Si voy a una posta, de repente no me atienden bien”. Entonces lo que queremos es convencerlos demostrándoles que en las postas los atienden bien.
— Pero los propios médicos quieren estar en el hospital y no abajo, ¿no es cierto?Es cierto. Nuestra idea es que los médicos recién salidos roten en las postas.
— ¿Cómo va a mejorar la gestión de los hospitales?Los directores de los hospitales son médicos. Hay hospitales que están muy bien dirigidos. Hay hospitales que están más o menos bien. [Y] hay hospitales a los que les falta mucho. Entonces, con estas Diris estamos tratando de mejorar la gestión administrativa, no médica, de los hospitales. No digo que los médicos no son buenos administradores, pero prefiero que el médico se concentre en la medicina y le demos todo el apoyo en la parte logística, mantenimiento de equipos, inventarios, limpieza, seguridad. Todo eso vía la gestión administrativa...
— ¿Y la alternativa de contratar gerencias privadas para administrar los hospitales?En eso estamos. Hemos tenido un éxito muy grande en el Hospital del Niño de San Borja, que es una asociación público-privada [APP] en lo que se llama la [modalidad de] ‘bata gris’, que ve la parte administrativa, logística. Lo que quisiéramos es que todos los hospitales, por lo menos comenzando por Lima, sean ‘bata gris’. No queremos despedir gente porque ese es un problema social.
—¿Quisiera APP en ‘bata gris’ para todos los hospitales? Sería un gran avance…‘Bata gris’ para los 18 hospitales y ocho institutos de Lima. Y después ir llevando la ‘bata gris’ a las regiones. Y queremos que Pro Inversión haga una convocatoria de tal manera que sean procesos limpios, sanos, bien manejados.
— El Servicio Integral de Salud (SIS) paga por daño, por atención médica, pero la idea era que pagara a la red con un sistema capitado, como esas dos APP de Essalud, los hospitales Barton y Kaelin, que tienen una cantidad de personas a su cargo y el Estado paga una cantidad por persona. Entonces al hospital le conviene hacer atención primaria para que mucho menos gente llegue al hospital y, por lo tanto, resulte para ellos más rentable. ¿No se puede trasladar ese principio a las redes para hacer atención primaria disminuyendo el gasto e invirtiendo el ahorro en mejoras? No solo para ahorrar, sino para ser más productivo con los recursos que tenemos, que son escasos. Me refiero a médicos, enfermeras, obstetras. El asunto es más complicado porque tenemos 184 mil personas que trabajan en 8.033 centros de salud y hemos trazado cinco líneas de acción. Primero, fortalecer los servicios de primer nivel. Segundo, los recursos y medicamentos: si tenemos medicamentos en todos los niveles, vamos a tener tranquilo al paciente. Tercero, revalorar al recurso humano: estamos capacitando a los médicos, a los odontólogos, a las enfermeras, a las obstetras. Cuarto, mejorar el mantenimiento de la infraestructura porque no saben mantener los equipos y esta ‘bata gris’ va a resolverlo. Y lo último, lucha contra la corrupción...
— Ahí también puede ayudar la ‘bata gris’.Muchísimo.
— En el SIS, por ejemplo, se descubrieron una serie de corruptelas y forados, desviaciones hacia consultorios y clínicas privadas… Hay un nuevo jefe del SIS. Es un médico con mucha experiencia que está recomponiendo el SIS. Estamos pagando las deudas que tenía el SIS y en el corto plazo lo vamos a tener totalmente saneado. Igual en Cenares [Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud, que compra los medicamentos]. Hemos comenzado a descubrir una serie de compras excesivas que se han hecho en algunos insumos. A veces faltaba y, en algunos casos, recontrasobraba. Hemos encontrado lotes que pueden durar hasta el 2040, pero ya están denunciados todos a la fiscalía.
— ¿Qué tipos de corrupción han encontrado? De todo tipo. Por ejemplo, el médico que se llevaba al paciente a su clínica privada, que en muchos casos se llevaba medicina y hasta usaba el equipamiento. Si uno va a un hospital va a encontrar alrededor un clúster de tomógrafos, resonadores, boticas, etc. Entonces, he sido muy claro con los directores: encuentro un caso de estos y la Superintendencia de Salud (Susalud) entra a tallar. La estamos potenciando a escala nacional, nuevas oficinas. También tenemos robo de medicamentos…
— ¿Y cómo van a controlar eso? Con este equipo que hemos armado en Cenares. Lo dirige un marino, pero no es marino de guerra, sino de administración con una maestría en ESAN y un doctorado en Centrum. Ha armado su equipo y está pasando inspecciones a todos los establecimientos. Estamos encontrando almacenes de medicamentos por todos lados.
— Faltan médicos en provincias... Es cierto. Estamos enfatizando la Dirección General de Telemedicina con muy buenos médicos. Para contar un caso, se hizo una mamografía en Andahuaylas. La vieron los médicos en el hospital de Villa El Salvador, se diagnosticó en media hora y se dio la receta y el inicio del tratamiento. Todos los centros de atención de nivel 2 y 3 van a tener telemedicina.
— Qué hay de la propuesta de integrar los hospitales del Minsa con Essalud, la interoperabilidad…Ya se ha firmado el acuerdo de interoperabilidad: si yo necesito algo, se lo brindo a Essalud; si Essalud necesita algo me lo brinda. Ahora, tengo un equipo que preside un economista de muy buen renombre que es Sergio Chion, para analizar un seguro universal de salud. No quiero adelantar nada.
— No hay data acerca del costos de las intervenciones, indicadores de productividad en los hospitales, postas… Estamos montando con un equipo todo el tema de indicadores de productividad de los centros de atención, eso es importantísimo y hacia eso estamos yendo.
— ¿No hay resistencia a la meritocracia?Tenemos acá 16 gremios con los cuales trabajar. Hemos tenido una muy buena comunicación. Lógicamente, todos piensan que el ministro de Salud debe de ser un médico… El tema de sueldos y salarios también es un asunto que estamos trabajando con pinzas para que se le pueda dar lo mayor posible a cada uno, siempre y cuando sea productivo.
— ¿Cómo asegurar una evaluación de productividad y desempeño?Sin duda, esa parte es fundamental. Pero son mil aristas que tenemos que trabajar y estamos optimistas, va a haber oposiciones, quejas, pero tengo un solo objetivo: que la salud llegue con calidad a todos los peruanos.