ÓSCAR CASTILLA Unidad de Investigación
La División de Investigaciones Especiales (Divinesp) y el Departamento Técnico Judicial (Deptejud) –ambas unidades de élite de inteligencia y escucha telefónica legal antidrogas– fueron desarticuladas por orden del director general de la PNP, Raúl Salazar, informaron fuentes policiales de alto nivel.
Más de 20 efectivos de la Divinesp y del Deptejud (conocido como Constelación) fueron sorpresivamente retirados de sus cargos, después de cinco años de permanencia en esta oficina, y destacados a puestos policiales de Lima y provincias, como la Policía de Carreteras de Apurímac y de Cusco, la Escuela de Suboficiales de Puno y de San Bartolo y la Unidad Antidisturbios de la VII Región, entre otros.
A fines del 2011, tras la elección de Ollanta Humala, el comando policial de entonces estuvo cerca de desarticular a la Divinesp y a Constelación, pero la medida abortó a raíz de una publicación de El Comercio. Entonces se identificó al asesor en temas de defensa Adrián Villafuerte Macha como uno de los principales interesados en la colocación de ‘personal de confianza’ en esta unidad.
Sin embargo, ahora la orden de purgar a esta unidad se ejecutó mientras la atención estaba centrada en los temas de seguridad ciudadana y en la permanencia en el cargo del director general Raúl Salazar. Precisamente, el comando que este dirige dispuso el retiro de los jefes de tres departamentos de la Divinesp, los mayores PNP Marco Tataje, Rubén Durand y Jorge Villar, así como de casi todo su personal.
La misma suerte corrió el jefe del Deptejud de la Dirandro, comandante PNP Luis López y otros agentes que laboran en Constelación. El jefe del programa de escucha telefónica fue enviado a otra unidad de inteligencia de la Dirandro.
DIVINESP PARALIZADA La orden del general Salazar no llamaría la atención si se tratara de los cambios rutinarios que ocurren en la policía (que ahora se han hecho con retraso), pero ahora se ha retirado de golpe a más de 20 oficiales, así como a peritos y agentes de escucha.
La Divinesp es responsable de la investigación al clan Sánchez Paredes, de la captura de Fernando Zevallos ‘Lunarejo’, del espía Víctor Ariza, de los integrantes de Business Track, del cabecilla senderista ‘Artemio’ y la muerte del mando terrorista ‘William’ (en una operación conjunta con la Dircote).
También de la intervención de avionetas y vehículos con cocaína destinadas a Bolivia durante el 2012.
La historia de la purga en el grupo de élite de lucha antidrogas empezó el domingo pasado. Ese día el coronel PNP Javier Bueno Victoriano (jefe de la Divinesp desde mayo del 2012) convocó a los oficiales de esta unidad y, con oficio en mano, les leyó la lista de los cambios ordenados por el comando PNP que jefatura Salazar.
En la cita, los agentes pidieron explicaciones por la intempestiva medida (ya que tienen a cargo indagaciones pendientes con la fiscalía) y defendieron a su personal, pero el coronel Bueno dijo que no dejaría que lo sancionen por incumplir órdenes superiores, contó un testigo del hecho. Se desconoce qué papel ha jugado en esta purga el jefe de la Dirandro, Vicente Romero.
Desde entonces, la sede principal de la Divinesp de San Isidro y sus casas de seguridad en Lima –que al igual que Constelación reciben apoyo de la estación de la DEA en Lima– están desiertas y paralizadas.
PROPUESTA DE LA DEA RECHAZADA La estación de la DEA en Lima propuso al comando de la PNP que mantenga en sus cargos a los oficiales de la Divinesp, pero el pedido fue rechazado.
La DEA hizo la propuesta como parte del convenio que mantiene con la Dirandro, llamado Sensitive Investigative Unit (SIU), por el cual capacitan en temas de lavado de activos y lucha antidrogas a los integrantes de la Divinesp.
El Comercio buscó la versión del comando de la Policía Nacional y del jefe de la Divinesp, Javier Bueno, pero no fue posible.