Antes de responder las preguntas de la Comisión de Fiscalización del Congreso por el Caso Ecoteva, el ex mandatario Alejandro Toledo pidió hoy la palabra para protestar por una serie de hechos que, según dijo, vulneran su derecho a la legítima defensa.
Toledo señaló que varios miembros de este grupo de trabajo han adelantado opinión y me han prejuzgado. No solo eso. También consideró que al interior del grupo se ha incumplido el mandato del Tribunal Constitucional de mantener la reserva sobre documentos que tienen carácter de confidencialidad.
El ex mandatario también se quejó del tenor de la notificación con la que fue convocado a la comisión. Según dijo, en esta se le atribuye la compra de la casa en Casuarinas y la oficina en Surco. Yo no he adquirido la casa en Casuarinas ni la oficina de Torre Omega, que me exhiban los títulos de propiedad para acreditar lo que ya pre juzgaron, afirmó.
No tiene sentido una investigación donde ya me declararon culpable, subrayó.
Toledo aseguró ser el principal interesado en que se demuestre el origen lícito de los fondos, como lo estoy probando, a la vez que entregó al titular del grupo de trabajo, Vicente Zeballos, documentos como su declaración ante la fiscal Elizabeth Parco, además de la declaración detallada de Yosef Maiman, quien ha presentado abundante documentación acreditando el origen lícito de los fondos de Ecoteva.
En otro momento, se quejó de que al ex presidente Alan García se le haya notificado la investigación congresal en su contra en tres páginas y a él en un párrafo.
Toledo también rechazó que legisladores fujimoristas hayan solicitado que se incluya en las investigaciones a su hija mayor Chantal Toledo y hasta su detención. Esto me parece, con todo respeto, inaceptable, yo no me escapo, dijo.
Antes de concluir su primera intervención, el ex mandatario también solicitó a los miembros de Fiscalización que se abstengan de adelantar opinión y violar la reserva de los documentos.