El abogado Julio Arbizu se despidió hoy del cargo de procurador anticorrupción haciendo un balance de su gestión, en la cual, destacó, se aumentó en 150% la recaudación de reparaciones civiles a favor del Estado.
Arbizu, además, defendió su estilo de trabajo, que para algunos miembros de la oposición era radical y digitado desde Palacio de Gobierno.
Ha sido un honor. Me satisface saber que nunca me alejé del ideal del servicio público. Me voy con esa certeza absoluta.— julioarbizu (@julioarbizu) enero 10, 2014
Anoche Arbizu anunció que había presentado hace unas semanas su renuncia.
El saliente procurador sostuvo que, cuando se defiende al Estado, se debe hacerlo con todas las herramientas “que nos da la ley”. “Si a algunos eso les pareció radical, hay que celebrar que ese radicalismo haya rendido frutos (…) Hoy podemos señalar que solo el año pasado se han subastado bienes (incautados a sentenciados por corrupción) por 12 millones de soles, que van a las arcas del Estado”, añadió.
El abogado afirmó que la lucha contra la corrupción no solamente debe ser de palabra, sino real.
En esa línea, indicó que su despacho actuó sin importar quién estuvo al frente. Puso como ejemplo que el Procuraduría Anticorrupción denunció al ahora ex presidente regional del Cusco Jorge Acurio. La autoridad regional fue condenada a cuatro años de prisión suspendida al ser hallado culpable por los delitos de colusión ilegal y negociación incompatible o aprovechamiento indebido del cargo en agravio de la Municipalidad Provincial de Calca
También dijo su portafolio tuvo una participación activa en el juicio en contra de Miguel Chehade, hermano del congresista nacionalista Omar Chehade, por el Caso Andahuasi.
“JAMÁS HUBO UNA LLAMADA”El saliente procurador indicó que “jamás” recibió una sola llamada de parte de autoridades del Ejecutivo para restringir su labor.
“Eso es una muestra de la autonomía con la que debe contar el procurador para ejercer su función”, mención.
Respaldó la designación de Christian Salas como su reemplazante, porque es una persona que conoce la reforma de la procuraduría.
Para concluir, reiteró que su renuncia al cargo “no obedece a cansancio personal, sino a la asunción de retos distintos”.
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