La madre y la hermana del presunto narcotraficante Gerald Oropeza, Pilar López y Araceli Oropeza, respectivamente, señalaron que, en el 2011, quisieron vender tres empresas a Miguel Facundo Chinguel, ex jefe de la Comisión de Indulto y Derecho de Gracia durante el segundo gobierno aprista y principal implicado del caso narcoindultos.
En una nueva audiencia del juicio oral por el caso narcoindultos, la madre y la hermana de Gerald Oropeza dijeron que Facundo Chinguel pretendió comprar las empresas Sanidad y Limpieza Industrial Peruana S.A.C. (Salinpsac), Servicios Generales Oro S.A.C. (Sergeoro) y Servicios Oro Perú S.A.C.
Ambas dijeron que se llegó a firmar un contrato de venta de las tres empresas con Facundo Chinguel, pero también coincidieron en que no se pagó lo acordado y que todo quedó en papeles.
Según la declaración de Araceli Oropeza, la empresa Salinpsac se iba a vender en S/.20 mil, mientras que en el caso de las otras dos compañías, Sergeoro y Servicios Oro Perú, su precio iba a ser de S/.30 mil cada una.
El prófugo Gerald Oropeza, también citado como testigo del juicio de narcoindultos, no se presentó a la audiencia. Él y miembros de su familia fueron llamados para que testifique sobre los vínculos comerciales que tuvo con Facundo Chinguel.
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Facundo Chinguel amenazaba con despedir a trabajador si no aceleraba #Narcoindultos ►http://t.co/RqEr7U532P pic.twitter.com/UjZSJimfBo— Política El Comercio (@Politica_ECpe) septiembre 1, 2015