Keiko Fujimori, luego de más de año y medio sin dar entrevistas televisivas, decidió cambiar su estrategia de comunicación y salió en un programa de televisión en el cual respondió preguntas durante casi hora y media.
La ruptura de este silencio ante los medios de comunicación, según analistas políticos consultados por El Comercio, ha sido una reacción de la lideresa de Fuerza Popular a una coyuntura en la cual se vio obligada a dar la cara para evitar que los cuestionamientos en su contra sigan aumentando.
“Me queda claro que la única razón para que haya salido a dar esta entrevista es porque se siente acorralada y ha sentido que no puede esconderse más. Se ha percatado que su partido necesita una cara visible de liderazgo más allá de las reuniones de bancada que tienen todos los martes”, dijo a este Diario María Alejandra Campos, directora de Proyectos de Ipsos Perú.
En ese sentido, consideró que la entrevista y las respuestas que dio Keiko Fujimori fueron dirigidas, no a la opinión pública en general, sino a los simpatizantes de Fuerza Popular y fujimoristas en general.
“Fue para decir 'por si acaso, estoy aquí, soy la lideresa y voy a defender la imagen del partido para llegar al 2021 para que ganen las elecciones' y de paso también para reiterar que iba a cobrarle al presidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK) el indulto”, comentó la analista.
Arturo Maldonado también opinó en esa misma línea, aunque también consideró que la motivación real de Keiko Fujimori fue desviar la atención de las declaraciones de Jorge Barata hacia la vacancia contra PPK.
“Ha buscado matar dos pájaros de un tiro. Ha tratado de hacer un control de daños pero, además, buscar desviar la atención de ella misma y centrarlo nuevamente en el presidente”, señaló.
- Dejar la cura de silencio -
Para Maldonado, la estrategia de no responder ante la prensa sino de manifestarse de manera reactiva y a través de redes sociales y los portavoces de Fuerza Popular fue negativa, a tal punto que Keiko Fujimori se ha visto obligada a cambiarla 20 meses después.
“Se puede ver en el declive de su popularidad. Esa estrategia de mudez le funcionó por un tiempo a Luis Castañeda pero no pega con ella. No le funciona a todos los políticos”, dijo el analista político.
María Alejandra Campos consideró, en cambio, que la estrategia del silencio sí le funcionó a Keiko Fujimori al inicio, cuando Fuerza Popular era un bloque sólido de 73 congresistas.
“Mientras existió ese halo de impenetrabilidad del fujimorismo, ella pudo manejar todo desde las sombras y le fue bien, pero ahora que en Fuerza Popular hay claras grietas y no se le han ido uno o dos, sino 14 congresistas, la hemorragia es significativa”, comentó.
Por eso reiteró que la entrevista que Keiko Fujimori dio el 6 de marzo iba dirigida a las filas naranjas. “Habría que ver si convence a los 'kenjistas' ocultos que quedan dentro de su bancada”, añadió.
- Futuro incierto -
Ambos analistas políticos coincidieron en que es muy pronto para considerar este momento como un cambio en la estrategia política de Keiko Fujimori, lideresa que acostumbra delegar dentro de su partido y declarar a través de sus voceros de mayor confianza.
“Tampoco ha dado declaraciones de mayor calibre. No dio un gran destape. Más noticia fue el hecho de que habló que lo que dijo en sí [...] Creo que va a seguir con la estrategia de operar detrás de cámaras y a través de los voceros porque a ella le disgusta mucho la incertidumbre de las repreguntas que pueden salir en una entrevista en vivo”, indicó Maldonado.
Consideró también que no habrá mayor repercusión en los niveles de aprobación pública su aparición ante cámaras, básicamente, por dos factores: Keiko Fujimori dijo lo que ya habían adelantado sus voceros y su respaldo está llegando a los niveles del fujimorismo duro que bordea el 25%.
Campos dijo que todavía no se puede predecir qué hará la lideresa de Fuerza Popular, pero especuló que salir más ante cámaras podría ayudarla ante sus simpatizantes, aunque esto agudizaría la confrontación entre el Ejecutivo y el Congreso.
“No sería lo mejor para la crisis política de país, pero me parce saludable para la democracia del país que todos vean más a menudo a la lideresa del principal partido del país”, concluyó
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