Una de las ilusiones más grandes de un hijo único es tener un hermanito y convertirse en el mayor. Poder jugar con él a la pelota, enseñarle los colores, ir a los parques juntos y vivir experiencias que marcarán su vida para siempre; sin embargo, no en todos los casos es fácil de conseguir. Esta es la historia de Mikey, un niño que a sus cortos 6 años le enseña al mundo entero lo inmenso que es el amor por un ser recién nacido. Un video publicado en #Instagram te hará emocionarte de principio a fin.
Si había algo que todos los días anhelaba desde lo más profundo de su corazón era poder tener un compañero de aventuras. Su madre Jessica Marotta se propuso, junto a su esposo Michael Marotta, cumplir su sueño. Por más que lo planearon y tenían una gran noticia para él, un aborto involuntario frenó su alegría.
“Él solo quería ser un hermano. Veía a todos sus amigos y compañeros de escuela teniendo hermanos, así que creo que eso fue difícil para él. Realmente aguantó”, contó la mujer a People.
Cuando por fin lograron concebir un bebé, ella con 39 años y su pareja con 38, el embarazo se vio interrumpido y en su temor por romperle el corazón y causarle mucho sufrimiento al pequeño Mikey acordaron no contarle nada pues “no queríamos que se sintiera agobiado por esa tristeza”.
“Fue algo por lo que habíamos estado intentando durante tanto tiempo... luego tuvimos la pérdida, estábamos devastados. Sentimos que no merecíamos lo que nos sucedió. Pero al mismo tiempo, le sucede a tanta gente”, agregó.
Sin embargo, la vida les tenía preparada una gran sorpresa y luego de 8 meses de ese terrible aborto involuntario, ella pudo volver a salir embarazada. Decidieron ser cautos y no contarle nada a su hijo hasta que se cumplieron 12 semanas de gestación.
“Estaba muy lloroso y emocionado. Él estaba muy emocionado.[Él] quería saber cuándo iba a venir el bebé ”, indicó Jessica Marotta.
Y ese momento llegó algunas semanas después y la reacción de Mikey ha dejado al mundo sin palabras, pues un video compartido en Instagram mostró toda la emoción que él había tenido contenida por tanto tiempo en el que aguardó convertirse en el hermano mayor.
-
Jake nació por cesárea el pasado 6 de marzo, nueve semanas antes de lo pensado. Pesó muy poco por lo que tuvo que permanecer en la unidad de cuidados intensivos neonatales tras el parto. Recién al día siguiente sus padres pudieron abrazar al bebé y Mikey no lo pudo hacer hasta una semana después.
Ese 17 de marzo quedará por siempre en la memoria de la familia Marotta y, sin dudas, nunca se borrará de la mente del recién estrenado hermano mayor.
Fotografías compartidas en Instagram demuestran el gran amor que sintió al ver por primera vez a Jake. Su rostro tenía una expresión sin precio, inolvidable. Él puso al indefenso bebé en su pecho y el contacto piel con piel aumentó aún más su felicidad.
“Fue muy dulce. Estaba muy emocionado (…) Cuando comenzó a abrazar a Jake solo se rió, fue una risita nerviosa. Parpadeó un montón porque estaba realmente emocionado. Probablemente fue una de las cosas más emocionales que he visto”, agregó la orgullosa madre.
Luego de ese día, que se compartió en Instagram, ambos niños son inseparables y Mikey busca siempre acurrucarse al lado del pequeño. “Le dice las cosas más bellas y le cuenta historias divertidas. Jake le da tranquilidad, sí él grita su hermano viene a calmarlo. Él fue hecho para ser este hermano mayor. Los dos juntos son bastante sorprendentes”.
Esta historia de amor entre hermanos solo demuestra que el mayor siempre cuidará al más pequeño y que estarán cerca por el resto de sus vidas.