Te amo, papá. Ellos me obligaron a hacerlo, dijo entre lágrimas la ciudadana escocesa Melissa Reid (20) luego de reencontrarse con su padre en la Dirando, donde se encuentra detenida desde el pasado 6 de agosto por presunto tráfico ilícito de drogas desde el aeropuerto de Lima.
William Reid, gerente de una compañía de gas, no veía a su hija desde que la dejó en el aeropuerto de Glasgow hace siete semanas. Melissa viajó a Ibiza, donde planeaba trabajar en bares y clubes durante una temporada. Sin embargo, algo salió mal y ahora podría ser condenada hasta 25 años de cárcel en el Perú.
En la conversación con su padre, la joven narró que en la isla europea una de sus amigas le presentó a un apuesto británico que se identificó como Jake. Este sujeto la puso a disposición de mafiosos colombianos que según la joven la obligaron bajo amenazas de muerte a viajar con ellos a Palma de Mallorca y luego a Madrid.
Pensé que me iban a matar. Ellos dijeron que sabían todo sobre mí y mi familia. Yo temía que les hicieran daño si no hacía lo que me pedían, sostuvo la mujer en declaraciones que recoge el Mail Online.
Melissa afirma que conoció Michaella McCollum, quien cayó detenida con ella, en uno de los rincones sucios los mafiosos en Palma. Se les mantuvo en cautiverio en una casa, dijo, y luego fueron trasladas a Lima por separado. Ambas mujeres fueron detenidas el pasado 6 de agosto en el aeropuerto Jorge Chávez de Lima con 12 kilos de droga cuando intentaban viajar a Madrid.
De acuerdo a fuentes policiales, Reid y McCollum fueron captadas por la mafia que lideraba en Lima Philip Austin Collins, sobrino del cantante Phil Collins y recluido desde mayo en el penal de Piedras Gordas.
La organización de Collins suele utilizar como burriers a ciudadanos del Reino Unido. Antes que McCollum y Reid, cayeron con drogas los ingleses Edward Murphy y Robert Trevor Bekest, ambos de 42 años, y Robert Lejare y Mark Barjicle, ambos de 41.