Contradicciones y denuncias de familiares rodean al caso de Kerk, el niño de 10 años que fue encontrado hoy luego de que fuera reportado como desaparecido desde la tarde del viernes pasado.
La versión de su padrastro Abel Escudero y de su madre Olga Peredo señala que el menor fue enviado solo a la avenida Wilson, en el centro de Lima, para cumplir un encargo. Sin embargo, el ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, dijo esta mañana a Canal N que el pequeño se había extraviado el fin de semana luego de haberse dedicado aparentemente a la venta de caramelos.
“Él tenía una bolsa de caramelos, aparentemente dedicándose a este oficio. Eso será materia de investigación”, refirió.
Herly Sánchez Munaylla es la miembro del serenazgo de Lima que encontró al niño aproximadamente a las 8:20 a.m. durmiendo frente a una conocida tienda por departamentos en la cuadra 6 del jirón de la Unión.
El testimonio de Sánchez Munaylla refiere que el niño le dijo que su mamá le mandaba a vender golosinas los fines de semana, reportó el periodista de El Comercio, Luis García Bendezú. Asimismo, insinuó una especie de maltrato familiar, pero luego se calló y empezó a llorar.
Más temprano, la agente manifestó a la prensa que el menor se encontraba muy sucio y no quería ni regresar a su casa ni ir a la comisaría.
TÍOS DEL NIÑO CUESTIONAN AL PADRASTRO Hasta la dependencia policial de Monserrate llegaron también hermanos de Olga Peredo, quienes rechazaron que ella haya maltratado al menor, pero centraron sus críticas en el padrastro. El escolar se quedaba durante el día con aquel, puesto que la madre trabajaba como doméstica.
Melanio Pereda Carranza confirmó incluso que Escudero habría agredido anteriormente a su pareja, por lo que incluso hay una denuncia policial.
Al respecto, Ana Escudero Tambraico, hermana de Abel, rechazó las acusaciones de maltrato contra el niño. Pero sí admitió que la denuncia contra el padrastro fue presentada en la comisaría de Comas en diciembre del 2012.
Los familiares de la señora Olga refirieron además que el padre biológico de Kerk responde al nombre de Andy Lara Vivar, quien trabaja como profesor al interior del país y no se haría responsable de su hijo.
FALTABA AL COLEGIO Otro aspecto que llama la atención es que según un profesor del colegio donde estudiaba el niño, este había comentado que tenía problemas en casa y que no quería asistir a clases. Según manifestó a RPP, tiene cinco faltas en lo que va del mes.
En tanto, el jefe de la región policial de Lima, Luis Praeli, quien conversó con el menor, reiteró que este se encuentra en buen estado de salud y que aparentemente sí tenía “una buena relación con los padres”.
Praeli Burga sostuvo que Kerk habría decido vender caramelos “para autoalimentarse” luego de quedarse por el centro de Lima.