La ministra de Educación, Patricia Salas, indicó que los padres de familia de colegios privados que compraron libros escolares con errores pueden pedir la devolución del dinero pagado por los mismos.
Al respecto recordó hoy en Canal N que “no hay ninguna norma que nos permita (como ministerio) tener algún tipo de censura o calificación sobre el contenido de los textos” de colegios privados. Sin embargo, refirió que hay hasta tres vías de sanción en este caso que ha afectado a unos 200 centros educativos a nivel nacional, perjudicando así el conocimiento de los alumnos.
Una sanción es al colegio por parte del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi). Otra es la medida administrativa de parte del ministerio y por último, la sanción a la editorial.
Salas dijo que le parece bien la normativa actual que da libertades a colegios privados, como el decreto legislativo 882 que promueve la inversión privada en la Educación. Pero manifestó la necesidad de mejorar los sistemas de alerta temprana para evitar que irresponsabilidades profesionales como las conocidas se multipliquen.
Aunque refirió que la responsabilidad recae actualmente en los directores de los colegios y en estos mismos como institución, recomendó a los padres de familia ejercer mejores elementos de control respecto a los libros escolares que adquieren.