Ante un paso tan importante, lo principal es tener muy claro que la vocación es una decisión profundamente personal, y los criterios que se pueden aplicar idealmente deben responder a las prioridades de quien la tome. Entonces, ¿estudiar en la universidad o en un instituto? He ahí el dilema. “En Perú, lamentablemente, estudiar en la universidad es una decisión que se toma más por un tema cultural que vocacional. Por ello, si estudias en la universidad puedes ser aplaudido por tu familia y por los demás, más que si estudias una carrera técnica”, explica el actor y psicólogo Javier Echevarría.
La decisiónLas diferencias más tangibles entre estudiar en un instituto y una universidad suelen estar ligadas al tiempo y dinero que se quiere y puede invertir en esa etapa de formación ya que por lo general las carreras universitarias son más prolongadas y más costosas. “Sin embargo, el corazón de la elección pasa por identificar si deseamos realizar estudios que le den mayor espacio a los conocimientos teóricos como es en el caso de las universidades. Desde su esencia, los institutos brindan formaciones de carácter más técnico y el fondo está centrado en desarrollar habilidades prácticas”, manifiesta la psicóloga Cecilia Rospigliosi de PORVOCACIÓN, Centro de Orientación Vocacional. La decisión racional tendría que estar dirigida a notar si tus intereses son específicos o más generales. La universidad tendría que estar dirigida a los que tiene un interés por un ‘universo’ de conocimiento. En cambio, la carrera en instituto está dirigida a un campo de conocimiento específico. “Lo que está ocurriendo actualmente es que la mayoría de personas que estudian en universidad tienen intereses específicos y se aburren de cursos generales que te abren la visión”, revela Echevarría.
Empleabilidad Para ciertos puestos de trabajo –declara Verónica Cagigao Nájar, coordinadora de Salud Mental en consultorios LIBERA-, los empleadores optan por profesionales técnicos, sobre en todo en los campos de metalúrgica, minería e ingeniería eléctrica; mientras que, si piensas dedicarte a las ciencias sociales o de salud, podría ser mejor llevar la carrera en una universidad. Entonces, ¿en qué situaciones conviene estudiar una carrera técnica? Javier Echevarría enumera tres circunstancias: 1) cuando quieres insertarte rápidamente al mercado laboral, 2) Cuando tus intereses son específicos, y 3) cuando eres una persona que aprende más con la práctica que con la teoría.Entre sus principales ventajas, una carrera técnica tiende a ser más corta, más específica y te permite una rápida inserción laboral. Además, en algunas carreras técnicas se puede convalidar con una universidad, con la posibilidad de ir trabajando y generando ingresos ejerciendo para poder continuar con nuestra formación. Del otro lado, la formación universitaria te da la oportunidad de conocer un poco más el mundo interdisciplinario, encontrarte con esos otros mundos paralelos a tu carrera también puede resultar enriquecedor y muy complementario en la formación personal.Oferta y demandaSi bien la presencia de institutos se ha elevado considerablemente, debemos prestar mayor atención a la calidad que a la cantidad. Por ello, Cagigao Nájar recomienda averiguar cada carrera a partir de su malla curricular, convenios, cuántos números de egresados tiene, y de ellos, cuántos han encontrado empleo.Según Rospigliosi, desde hace diez años la demanda laboral de técnicos en el país va en ascenso, y la proyección indica que esta tendencia continuará. Dato importante: por el momento el número de egresados de las escuelas técnicas no alcanza a cubrir la necesidad de tales profesionales en el Perú. //