La exigencia de asesores internos en las empresas ha incrementado la demanda de esta especialidad en las universidades.
En tiempos en que se valora el compromiso de las empresas que cumplen con los marcos regulatorios nacionales e internacionales, no es suficiente conocer la ley. Es necesario, además, interpretar el derecho desde un punto de vista legal y económico. Por ello, las maestrías en Derecho Empresarial son una gran herramienta para innovar en la gestión de los negocios y adelantarse a los cambios.
EXIGENCIAS
La demanda de esta maestría se justifica por la complejidad del sistema jurídico, que plantea retos en distintos ámbitos. El nivel de exigencia en el cumplimiento de requisitos y normas se ha elevado en aspectos como defensa civil, seguridad y defensa del consumidor, entre otros. A su vez, todas las compañías son figuras legales que buscan representar a las personas, los grupos empresariales y el Estado.
Mario Madau, director de la Maestría en Derecho Empresarial de la Universidad de Lima, afirma que la tendencia actual de las empresas es la contratación de asesores internos que tengan la capacidad de integrar los conocimientos jurídicos con los del negocio. A su vez, los profesionales deben fusionar esta información con otras disciplinas, como la Contabilidad, la Administración, la Economía y las Finanzas.
La demanda se mantiene estable, con una tendencia al alza. Jorge Avendaño, director de la Maestría en Derecho de la Empresa de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), añade que se observa una mayor postulación de profesionales de otros campos académicos como la Contabilidad, la Economía o las Ciencias de la Gestión. La modalidad virtual les permite contar con profesionales de todo el Perú e, incluso, del extranjero.
Los profesionales que suelen optar por esta maestría son jóvenes con ambiciones de integrar los conocimientos jurídicos con otras herramientas, de modo que puedan brindar un buen servicio a sus clientes. Suelen ser abogados que pertenecen a estudios y empresas de renombre, con un especial interés en desarrollar los principales criterios legales. Sin embargo, también se observan a egresados de otras carreras afines a la especialidad.
ENSEÑANZA
Para Mario Madau, la maestría posee un enfoque integrador y tiene como eje central de estudio a la empresa. La malla curricular cubre los principales aspectos del derecho empresarial, sin dejar detalles importantes como cursos electivos. “Nuestra propuesta busca que el estudiante tome contacto con todas las materias jurídicas que inciden en la vida empresarial e incorpora asignaturas que proporcionan herramientas de otras disciplinas no jurídicas”.
La principal innovación es la incorporación de la asignatura “Estrategias de gestión empresarial de los recursos jurídicos”, que brinda conocimientos en el gerenciamiento de equipos jurídicos para las gerencias generales de las empresas, así como para los estudios de abogados. Asimismo, este año se han implementado asignaturas sobre conocimientos contables, de finanzas, evaluación de proyectos y administración, desde el primer nivel.
Por su parte, Avendaño señala que esta maestría ha tenido cambios muy positivos como la implementación de una mención de responsabilidad social (RS), así como la reestructuración y relanzamiento de la mención de gestión para que el programa se perfile como un MBA para abogados. Asimismo, se ha creado una línea de investigación en los seminarios de tesis con un asesor y un asistente.
La metodología de enseñanza combina métodos como clases magistrales, análisis y resolución de casos, dinámicas de participación en clase y organización de foros de discusión en aulas virtuales, entre otros.
DESAFÍOS Y OPORTUNIDADES