La noticia causó un gran impacto y evocó imágenes propias del cine de terror o sobrenatural: un hombre había desaparecido, y con él casi todos los muebles de su alrededor, al abrirse un enorme agujero bajo su habitación mientras dormía.
Días después, las autoridades cancelaron la búsqueda del cuerpo de Jeffrey Bush, de 37 años, y un equipo de expertos procedió a demoler la vivienda, situada en Seffner, una comunidad a pocos kilómetros de la ciudad de Tampa, en el estado de Florida, Estados Unidos.
Pero, ¿cuán común es que se abra el suelo sobre el que caminamos? Algunos advierten que, en zonas como Florida, no se trata de ciencia ficción.
¿CÓMO SE FORMAN LOS SUMIDEROS? Para saber cómo se forman estos socavones debemos entender la geología subterránea del territorio donde aparecen.
En Florida tenemos un material geológico cerca de la superficie que se conoce como piedra caliza, explica a BBC Mundo Harley Means, geólogo del Florida Geological Survey, dependencia del Departamento de Protección Medioambiental de ese estado.
Resulta que la caliza puede ser erosionada por la acción semanal del agua de lluvia, que es ácida.
Con el paso del tiempo –y hablamos de miles o millones de años- el agua ácida puede producir cavidades en la caliza, dando lugar a algo parecido a un gran queso suizo, si me permite la analogía, añade Means.
Dichos huecos se pueden hacer lo suficientemente grandes como para no poder sostener los materiales de la superficie, como la tierra y la arcilla, que entonces colapsan.
Los expertos coinciden en que cada uno de estos eventos es único y diferente, y que depende mucho de las circunstancias del entorno.
Vanessa Banks, investigadora especializada en riesgos geológicos en la British Geological Survey, recuerda que los distintos tipos de roca se comportan de forma diferente.
La ocurrencia de un colapso depende de la naturaleza de la tierra o la roca en la superficie, que forma un puente sobre la cavidad que se está formando por debajo, le dice a la BBC.
Depósitos consolidados como la grava o la arenisca taparán los huecos hasta que la tensión sea excesiva, entonces la roca caerá sobre la cavidad inferior.
Asimismo, la fuerza del agua ácida varía y, por tanto, el ritmo de erosión también es diferente.
La erosión puede durar muchos años, pero el colapso puede ser repentino ya que depende de un momento crítico que viene determinado por el material en la superficie, señala la británica Banks.
¿SE PUEDE PREVENIR? Una de las ideas que se repite estos días y que más preocupa a los ciudadanos es la dificultad de predecir cuándo se va a abrir un socavón bajo nuestros pies.
Efectivamente, yo no me puedo parar en una porción de tierra y decir que se va a producir un socavón en la próxima hora, semana o año; en ese sentido, es parecido a lo que ocurre con la incapacidad de predecir la actividad sísmica, señala Harvey Means a BBC Mundo.
Pero como geólogos, lo que sí podemos hacer es delinear áreas donde sabemos que hay más posibilidades de que aparezcan estos sumideros, aclara.
El geólogo recomienda que la gente se informe sobre por qué y dónde hay más posibilidad de que surjan los socavones, y que consulte cuáles son los detalles que hay tener en cuenta sobre la tierra donde está edificada o se va a edificar una propiedad.
Además, para aquellos que estén pensando comprar una vivienda y estén inquietos tras el incidente de Tampa, Means indica que se pueden contratar los servicios de un geólogo que puede hacer pruebas en el terreno para determinar si hay cavidades subyacentes.
Por los datos que se tienen, Jeffrey Bush no tuvo opción de escapar y tampoco su hermano pudo hacer nada por rescatarlo.
Pero, subrayan los científicos, esto no es lo habitual.
La tierra o arena que cubre la caliza colapsa y forma un sumidero cuando ya no tiene su soporte natural, debido a la cavidad que se ha formado por debajo. El colapso final de la superficie puede durar unos minutos o varias horas.
La gente debe saber que colapsos catastróficos como este, que ha llamado la atención mundial, son extremadamente extraños, precisa Harley Means.
Normalmente, cuando esto sucede, el proceso es tan lento que hay tiempo para huir. Son poquísimas las veces que alguien ha muerto por un socavón natural en Florida, por eso este caso ha sido tan único, insiste el geólogo estadounidense, quien añade que es la primera vez que ve algo así.
¿SOCAVÓN NATURAL O CAUSADO POR LA ACCIÓN HUMANA? Pese a lo imprevisto de estos sucesos, hay algunas señales de advertencia. Esto incluye puertas y ventanas que no cierran adecuadamente, o grietas que aparecen en la base de las casas. En algunos casos se detecta movimiento de tierras.
No podemos saber qué estaba pasando en aquella casa inmediatamente antes del colapso, le dice Harley Means a BBC Mundo.
Es pronto para saber si había cañerías con fugas o alguna otra falla debajo de la vivienda, con lo que no se puede descartar que la acción humana influyera en la tragedia que ahora vive la familia de Jeffrey Bush.
Se ha comprobado que la intervención humana puede acelerar el desarrollo de estos eventos geológicos. No es que los humanos estén disolviendo, de forma intencionada, la caliza subyacente. Ésta ya tiene huecos que se han formado a lo largo de miles y miles de años, sostiene el geólogo.
Sin embargo, acciones como la extracción de grandes cantidades de agua de la tierra pueden exacerbar el proceso, ya que los huecos quedan llenos de aire, y el aire no es tan capaz de soportar el peso como lo hace el agua, concluye.