KUWAIT (Reuters). Arabia Saudí dijo el domingo que la gente que trataba con camellos debía llevar mascarilla y guantes para evitar la propagación del Síndrome Respiratorio de Oriente Próximo (MERS), en la primera advertencia de este tipo mientras los casos del virus potencialmente fatal se acercaban al medio millar en el reino.
Expertos en salud dicen que los camellos son el foco animal más probable de la enfermedad, que el Ministerio de Sanidad saudí dijo había afectado a otras siete personas.
El MERS es un coronavirus como el SARS, que mató a unas 800 personas en todo el mundo tras aparecer por primera vez en China en 2002. No existe una vacuna o tratamiento antiviral contra él.
Más de una cuarta parte de los 480 diagnosticados con MERS en Arabia Saudí, el punto central del brote, han muerto. La inquietud pública ha crecido en medio de rumores en redes sociales sobre la falta de transparencia por parte de las autoridades sobre la propagación de la enfermedad.
El reciente aumento de los casos es motivo de preocupación tanto en Arabia Saudí como en el extranjero, sobre todo por la afluencia de peregrinos de todo el mundo en julio, durante el mes de ayuno musulmán de Ramadán.
Aunque el vínculo con los camellos -que tienen un lugar especial en la sociedad saudí- es objeto de un amplio estudio por parte de científicos fuera del reino, éste ha estado relativamente ausente de gran parte del debate nacional oficial.
En un comunicado, el Ministerio de Agricultura aconsejó el domingo no estar en contacto con camellos a menos que fuera necesario y lavarse las manos antes y después de hacerlo, así como el uso de mascarillas, dijo la agencia estatal de noticias SPA.