La contribución del derretimiento de la Antártida al aumento del nivel de mar en este siglo será considerable, pero algunos de los escenarios más pesimistas planteados por varios investigadores sencillamente no son realistas.Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Esta es la conclusión de una investigación que modeló cómo reaccionará el Polo Sur si los gases con efecto invernadero aumentan a un ritmo medio o elevado.
El resultado más probable, aseguran, es que las aguas globales aumenten 10 cm para 2100. La perspectiva de un incremento de 30 cm o más, sugerida por estudios previos, tiene solamente una posibilidad de uno en 20.
La investigación incorpora datos físicos reales de los lechos de roca del continente y de cómo el hielo se mueve sobre ellos. También se apoya fuertemente en observaciones satelitales que siguen el movimiento de los continentes en la actualidad. Allí, los glaciares son inestables y se encuentran retrocediendo de forma “irreversible”.
Escenario inverosímil
“Con nuestro modelo hemos hecho cerca de 3.000 simulaciones”, explicó Edwards. “Se han hecho múltiples simulaciones antes, pero lo que no se había hecho es ver cómo estas se comparan con la situación en la actualidad”, indicó. Esta información no se incorporaba para reevaluar las predicciones, agregó la científica.
El estudio tomó estas 3.000 simulaciones y las comparó con lo que está ocurriendo ahora en el Mar de Amundsen (Antártida) y añadió estas diferencias al modelo. El resultado, para una proyección que toma en cuenta un clima más cálido, presente como escenario más posible uno en que el nivel global del mar aumenta 10 cm para 2.100.
La diferencia del nuevo estudio, sin embargo, es que rebaja la puntuación de los resultados de alto impacto y bajas probabilidades –la posibilidad de que el colapso de una Antártica inestable pueda añadir medio metro o incluso un metro al incremento del nivel de los mares para fin de siglo. “En nuestro estudio, estos (escenarios) sencillamente no son verosímiles”, dijo Edwards.
Además de la Antártida
“El estrato de la Antártida es muy importante para el comportamiento de la capa de hielo, y hay partes de él que son demasiado disparejas o no tienen una inclinación que permita que algo ocurra rápidamente”, explicó.
El estudio franco-británico solo se centra en la contribución de la Antártida al incremento del nivel de los mares. Pero, por supuesto, hay otros factores que contribuyen a este efecto como el derretimiento de Groenlandia y otras reservas de hielo además de la expansión general de las aguas en océanos que se están calentando.
La evaluación del IPCC pronosticó un incremento de entre 42 cm y 80 cm, con una estimación central de cerca de 60 cm para un escenario de emisiones de medias a altas de gases con efecto invernadero.
“Más confiables”
La información satelital utilizada en los modelos de este estudio fue recabada durante 20 años por un proyecto que lleva el nombre de IMBIE.
Andrew Shepherd, investigador de la Universidad de Leeds, en Reino Unido, y director de este proyecto, comentó sobre el estudio: “Es la primera predicción de la pérdida futura de hielo que realmente toma en consideración los cambios actuales”, indicó. “Por esta razón, podemos confiar más en sus hallazgos”, añadió.
Y, “a pesar de que la perspectiva de una reducción extrema del hielo es poco probable, no hay motivo para ser complacientes sobre los impactos del cambio climático en nuestro estilo de vida”, aseguró Shepherd.