Un equipo de astrónomos publicó por primera vez una imagen de gran calidad que recoge el momento en el que una enorme masa de hidrógeno se 'derrama' en el vacío estelar tras abandonar una nebulosa, como si se tratase del champán de una botella al ser descorchada.Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
El Observatorio Europeo Austral (ESO) explicó en un comunicado que la fotografía, obtenida por el telescopio “Very Large Telescope” (VLT) ubicado en Chile, muestra “una espectacular y brillante nube roja de gas de hidrógeno” alrededor de la nebulosa RCW 34, una formación situada en la constelación austral de Vela.
Este fenómeno, explican los científicos, se debe a que las estrellas jóvenes en la región más brillante de la RCW 34 calientan el hidrógeno a su alrededor considerablemente, haciendo que se expanda a través del gas que le rodea, que se encuentra a menores temperaturas.
Cuando el hidrógeno calentado alcanza los límites de la nube de gas, “estalla hacia fuera, derramándose en el vacío como el contenido de una botella de champán al ser descorchada”, explica la nota de la ESO, que añade que este proceso se conoce científicamente como 'flujo de champán'.
Los expertos destacaron asimismo que el marcado color rojo de la gran masa de gas revela que en el interior de la nebulosa “hay un montón de estrellas jóvenes en esta región con masas de tan solo una fracción de la del Sol”.
El hidrógeno aporta a las nubes de gas ese color rojo y este elemento químico en grandes cantidades es “un indicador de regiones de formación estelar” intensa, argumentaron los científicos.
Las estrellas nacen a partir de nubes de gas que colapsan y, por lo tanto, son abundantes en regiones con grandes cantidades de este elemento, como la nebulosa RCW 34.
Fuente: EFE