MADRID. El limusaurus, un dinosaurio que vivió a comienzos del Jurásico, perdía los dientes según llegaba a la edad adulta y posiblemente variaba su dieta de omnívoro-carnívoro a herbívoro. Se trata de un fenómeno raro que puede tener implicaciones para entender cómo fue la evolución hacia el pico.Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Así lo pone de manifiesto un estudio publicado por la revista “Current Biology”, en el que los expertos han comparado los restos fósiles de una decena de 'Limusaurus inextricabilis', una especie de terópodo ceratosauriano antecedente de los pájaros que vivió durante el Jurásico superior (hace unos 160 millones de años), encontrados en el sudeste de China.
El conjunto de fósiles permitió reconstruir el desarrollo de esta especie con ejemplares desde menos de un año y hasta los 10, lo que llevó a un descubrimiento inesperado: el dinosaurio tenía dientes durante la infancia, pero los iba perdiendo gradualmente con el crecimiento.
Un “fenómeno muy raro y muy interesante” por el cual las mandíbulas dentadas de los individuos jóvenes se convertían en no dentadas y con forma de pico a lo largo del desarrollo, explicó Shuo Wang de la Universidad de Beijing, que desarrolló el estudio junto a la Universidad George Washington.
Así, el limusaurus se convierte en el primer reptil conocido con edentulismo ontogenético; es decir, que sufría una reducción o pérdida dental durante el desarrollo.
Estas y otras evidencias llevaron a los investigadores a concluir que los ejemplares jóvenes eran “probablemente comedores de carne omnívoros”, mientras que los adultos con mandíbula de pico seguramente modificaban su dieta, que se basaba en plantas.
La primera vez que se tuvo conocimiento de este tipo de dinosaurio fue en el 2001, cuando se halló un ejemplar joven fosilizado, y -según fueron apareciendo nuevos restos- los expertos llegaron a pensar que se trataba de dos especies diferentes, pues unos tenían dientes y otros no, explicó Wang en un comunicado.
Los investigadores identificaron 78 cambios evolutivos en los limusaurus, entre los cuales la pérdida de dientes es el más sorprendente y puede tener “importantes implicaciones para entender la evolución hacia el pico” de los pájaros.
La pérdida de dientes no es inusual entre los animales hoy en día, señaló Wang, quien recalca que hay peces y anfibios que sufren ese proceso, al igual que los ornitorrincos.
Este descubrimiento sugiere que los hábitos alimenticios y necesidades de algunos dinosaurios cambiaron a lo largo de su desarrollo, lo que, seguramente, fue acompañado de cambios en el sistema digestivo.
Fuente: EFE