Sí, sería sensacional que algún día el hombre sea capaz de respirar bajo el agua sin ningún tipo de asistencia mecánica o tecnológica. Pero esto nunca va a pasar porque nuestros pulmones no son capaces de extraer oxígeno del agua. Pero sí podremos respirar a través de líquidos, según el canal científico de YouTube SciShow.
Médicos están tratando de hacer que la ventilación líquida sea una realidad para salvar vidas. Debido a la presión que los pulmones sienten en el espacio o bajo el agua, este método podría ser útil mientras se exploran los confines del universo o las profundidades del océano. Pero por el momento, tiene el potencial de ayudar a aquellas personas que luchan por obtener suficiente oxígeno como bebes prematuros o personas con lesiones pulmonares.
-
El proceso parece sencillo: respirar un líquido. Pero nuestros pulmones no tienen la superficie que necesita para extraer suficiente oxígeno del agua: el aire que respiramos tiene 20 veces más oxígeno. Pero el líquido es mucho más espeso que el aire, por lo que nuestros pulmones luchan por expulsarlo de manera eficiente. Este es un primer problema para la ventilación líquida.
Los científicos que estudian el método trabajan con líquidos compuestos por perfluorocarbonos (PFC) en lugar de agua. Los PFC son hidrocarburos especialmente diseñados con moléculas formadas por carbono e hidrógeno, donde algunos de los hidrógenos han sido reemplazados con flúor. Este líquido es biológicamente inerte. No dañan los riñones ni el hígado.
Gracias a los enlaces débiles entre las moléculas de los PFC, se establece un tránsito sencillo de un montón de moléculas de gas que se comprimen para que puedan transportar tres veces más oxígeno a nuestra sangre, y casi 40 veces más mucho más oxigeno que bajo el agua a temperatura ambiente.
El reto de los investigadores está en que aún no han descifrado el segundo problema de la ventilación líquida: la viscosidad. Al ser más gruesos que el gas, los PFC no pueden moverse a través de los pulmones lo suficientemente rápido para eliminar el dióxido de carbono, lo que puede conducir a una condición peligrosa llamada acidosis respiratoria.
Esto último hace que la ventilación líquida total sea poco práctica, porque se necesita muchas bombas complicadas y otros equipos para hacerla funcionar. Un ventilador líquido capaz de hacer este proceso nunca ha pasado la etapa de prototipo.
Pero la ventilación líquida parcial, que llena aproximadamente el 40 por ciento de la capacidad pulmonar con PFC y el resto con aire de un ventilador normal, es un tratamiento prometedor para personas con lesiones pulmonares y bebes prematuros. Y todo parece indicar que no pasaría mucho tiempo para que el método obtenga aprobación regulatoria, lo que sería un primer paso para respirar líquido y poder explorar el espacio y el océano profundo.