EE.UU. (EFE). A Silvia Vásquez Lavado le hizo falta escalar el Everest para recuperar la confianza en sí misma tras una niñez marcada por los abusos sexuales. La ejecutiva de eBay buscará infundir esa misma fuerza a entre 8 y 10 jóvenes víctimas de tráfico sexual, a las que llevará al Everest en marzo.
En septiembre del 2005, cuando tenía 31 años, la alta ejecutiva peruana se puso en contacto con una agencia en Nepal especializada en montañismo para decirles que tenía ocho días para hacer el recorrido de ida y vuelta a la base de la montaña, situada a 6.500 metros de altitud. Sin embargo, recibió un mensaje con una negativa debido que el tiempo no era suficiente para hacer el viaje.
El mensaje no disuadió a la ahora responsable de la división de tecnología para empresas de eBay, quien contrató a un sherpa (guía) e hizo el recorrido en siete días. La experiencia resultó “conmovedora” y le dio un valor y energía hasta entonces desconocidos.
La ejecutiva de 40 años, que reside en San Francisco, hizo entonces una promesa, la de que volvería a escalar la montaña en el Himalaya a favor de una causa social. “Y así lo dejé”, explicó la directiva peruana, quien asegura que no fue hasta diciembre del año pasado, justo después de escalar el Aconcagua en Argentina, que tuvo claro cuál era su misión.
Fue al comenzar a descender de la cima, cuando le vino lo que describe como “una visión”, la de llevar a un grupo de jóvenes supervivientes de tráfico sexual de San Francisco y Nepal al Everest para ayudarlas a encontrar “la fuerza y la confianza” que ella descubrió años atrás.
Vásquez Lavado, quien creó recientemente la ONG “Courageous Girls” (Chicas Valientes), ya ha identificado a cuatro jóvenes estadounidenses de entre 18 y 19 años, residentes en la Bahía de San Francisco, que participarán durante los próximos meses en un programa de entrenamiento físico y psicológico para prepararse para la aventura. Las chicas recibirán también formación en escritura creativa para poder describir, de la forma más gráfica posible, su experiencia en el Everest.
La ejecutiva conectará a esas jóvenes con otras cuatro o cinco chicas nepalíes que han sufrido traumas similares y que la ONG espera identificar próximamente.