Se sabe que la bicicleta es uno de los medios de transporte más utilizados y el más ecológico. Sin embargo, el esfuerzo que requiere su uso no motiva a muchos. Por eso, los expertos del Senseable City Lab del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) crearon un dispositivo para optimizar la energía al momento de pedalear.
La Rueda de Copenhague es el nombre con el que han bautizado a su creación. ¿De qué se trata? Es una especie de plato que se adapta a la rueda trasera de una bicicleta convencional.
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El dispositivo tiene una serie de mecanismos que permite acumular la energía que se disipa cuando el usuario pedalea y frena, para almacenarla hasta que se necesite. De esa manera, tramos complicados como las subidas dejarán de serlo.
Además, el dispositivo se puede controlar con un smartphone. Con el móvil se podrá asegurar la bicicleta, hacer los cambios de velocidad y seleccionar cuánta ayuda se quiere recibir del pequeño motor.
La rueda cuenta, también, con un sensor que registra los niveles de esfuerzo realizado y la información de los alrededores, como las condiciones del tránsito, emisiones de CO2, ruido, temperatura del ambiente. Conocer esos datos puede servir para planificar rutas más saludables.
Datos de interés El acceso a todos los datos registrados por la Rueda de Copenhague se puede hacer vía smartphone o a través de la web. El prototipo se presentó en el 2009 durante la Conferencia del Clima de la ONU, en Copenhague. El dispositivo se encuentra a la venta. Cuesta US$799.
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