ADVERTENCIA: Este artículo contiene los mayores SPOILERS del penúltimo episodio de “Game of Thrones”.
Hay una secuencia en el episodio 8x05 de “Game of Thrones” donde los personajes cruzan un límite que, como espectadores, trazamos para ellos nuestras mentes. Para Daenerys Targaryen (Emilia Clarke) fue atacar a los inocentes de King's Landing, para Jon Snow (Kit Harington) tener que seguir en una batalla donde jamás debió participar.
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Si en el episodio anterior quedó claro que el rumbo actual de Dany es forzado, el de esta semana lleva esa idea al límite. Cuando ella escucha sonar la campana de rendición, algo se quiebra en su interior. Su moral, tal vez. O su cordura. Entonces deja que el fuego de Drogon consuma la capital.
Jon Snow (Kit Harington) pareciera ser el único de los altos mandos sorprendido por esta decisión, porque Grey Worm (Jacob Anderson) lo toma con estoicismo y carga a matar. El ex bastardo de Winterfell busca detener la masacre, pero a estas alturas del partido no puede hacerlo. Detuvo a un violador. Uno de los tantos que seguro tuvo en su ejército y al que hay que sumarle las fuerzas dothraki, pero en líneas generales no hizo diferencia alguna.
Daenerys no es como su padre. Daenerys es la “mhysa” (madre) que salvó a los inocentes esclavos de la Bahía de Dragones. Daenerys dejará el mundo mejor de lo que lo encontró. Durante toda la serie hemos sido bombardeados con esas ideas que, a solo un episodio del final, terminaron por irse por el desagüe. Claro, también hubo momentos de todo lo contrario, donde ella fue obtusamente cruel, pero fueron los menos. La suya era una historia de “romper la rueda” de lo viejo y empezar algo nuevo.
Pero no fue así. Como espectador hubiese aceptado este cambio de tener más sentido en la serie, si hubiese sido construido de manera progresiva; pero no fue así. Si Daenerys es la última enemiga a derrotar, lo cual es un error, es solo por capricho de los showrunners David Benioff y D.B. Weiss. Lo que sea que Jon y el resto de personajes hagan a partir de ahora será consecuencia de ese error.
Pero un error no es lo único que encontramos en “Game of Thrones” 8x05, sino más. Allí tenemos la lucha de Jaime Lannister (Nikolaj Coster-Waldau) contra Euron Greyjoy (Pilou Asbæk), quienes salvo Cersei nunca han tenido nada para oponerse mutuamente. Sí, Jaime resultó gravemente herido, pero quita esa escena y su final con Cersei se mantiene igual. No altera la trama.
Porque Cersei (Lena Headey) y Jaime mueren juntos en las profundidades de la Fortaleza Roja. Un final agridulce, pues la historia de Jaime sí se completa, que es morir junto a la mujer que amó, y por la que sacrificó todo, incluso su integridad. Para Cersei no, pues ella quería poder y, al final, lo obtuvo brevemente. Verla llorar por su vida, por la de su bebé, la humaniza; pero de ningún modo es un cierre satisfactorio a su historia desde el punto de vista narrativo.
Y sobre Tyrion Lannister (Peter Dinklage)... pues su traición no parece incorrecta si la vemos en perspectiva, pero aún así eso de poco le sirvió. No pudo salvar ni a la ciudad ni a su hermano y mucho menos la cordura de Daenerys. Tampoco es que él haya sido un personaje del todo inteligente, no desde mediados de la quinta temporada. Rescatar a Jaime se sintió más como un acto desesperado en lugar de una maniobra con sentido.
Si Tyrion consiguió algo con esa decisión, ello fue cerrar su historia con Jaime; al dejarlo ir con la persona que ama pero que, como finalmente ocurrió, lo llevó a su final.
Sin ir muy lejos, “Juego de tronos” cerró otra de sus historias con el esperado Cleganebowl, que no tuvo nada de épico y sí mucho de destructivo y brutal, justo como la historia que compartieron estos hermanos durante años; pero también sirvió para mostrarle a Arya Stark (Maisie Williams) que existe otro camino más allá de la venganza. Arya, en un extraño momento de claridad, acepta y se va.
Y aquí empieza otra de las tramas, quizá la más tensa: sobrevivir a King's Landing. Porque ver la destrucción de la ciudad desde la perspectiva de Daenerys no era suficiente; ahora la vemos desde el enfoque de los civiles heridos. Arya hace lo que puede y lo que puede es simplemente correr para escapar de la destrucción. Salvar a los civiles es imposible y, a duras penas, sobrevive.
Arya, durante gran parte de la serie, se ha dejado mover por la venganza. Pero nunca la venganza de alguien más la había puesto en tal peligro, ni siquiera la Boda Roja. Tras la masacre de King's Landing, parece obvio que ella matará a Daenerys y cumplirá así la profecía de Melisandre: los de Daenerys serían los ojos verdes que cerrará para siempre.
La mirada de Jon y Tyrion en los momentos finales del episodio es clara: nos equivocamos, no debimos confiar en Daenerys, esto no es justicia, esto es demasiado desproporcionado para ser considerado una venganza. Esto es solo resentimiento en el sentido más crudo del término.
Mientras tanto, en este reino de las cenizas en que se ha convertido King's Landing, hay un fantasma: el de Varys (Conleth Hill), quien tenía razón. Con toda la torpeza con la que fue manejado el breakdown de Daenerys, las consecuencias del mismo son innegables.
Westeros, como el mundo real nos demuestra cada día, solo cambia un tirano por otro.
PENSAMIENTOS SUELTOS
-Al verlo sin casco.... queda claro que “la Montaña” es el nuevo Darth Vader. ¿No?
-Grey Worm es otro de los que han cruzado el Rubicón. La mirada que intercambió con Jon no augura nada bueno para ambos.
-Cuando Daenerys perdió la cabeza en la escena de las campanas solo pude pensar en la undécima película de “Dragon Ball”, cuando vemos que el quiebre mental de Broly proviene de sus recuerdos del llanto de Gokú. Ambas circunstancias son demasiado estúpidas como para existir en primer lugar.
-Qyburn, en la mejor tradición del científico loco, muere a manos de su propia creación.
-Ningún elefante fue herido en la destrucción de King's Landing. Gracias por eso, Compañía Dorada.
-Jon es demasiado leal, pero luego de lo que hizo Daenerys yo no estaría tan seguro.
-No me queda claro cómo Daenerys se volvió tan experta en la conducción de un dragón. ¿Acaso no pudo hacer algo así con la Flota de Hierro en anterior episodio?
-¿Por qué Arya no mató a Cersei Lannister de noche? ¿Tanto demoraron ella y Sandor Clegane en llegar a la Fortaleza Roja?
-Hablando del “perro”... este episodio fue la primera vez en la que Arya lo llama por su nombre.
-Cuando Tyrion dijo que sin Jaime no habría sobrevivido a su niñez, solo podía pensar que el enano consideró el suicidio años atrás.
-Tyrion, además de no ser “particularmente inocente” como él mismo dijo, tuvo una tremenda falta de juicio al decirle a Varys el secreto de Jon. En ese aspecto Daenerys tiene razón: jugó a favor de Sansa. El Tyrion de la temporada 2 jamás habría caído en esa trampa.
-¿Sansa en el Trono de Hierro? La idea suena demasiado bien.
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