El destino de Kevin Spacey tras la acusación de Anthony Rapp de acoso sexual es incierto. Lo único seguro es que “House of Cards”, producción para Netflix que protagoniza desde el 2013, terminará con su sexta temporada. La historia ha dejado cabos sueltos que podrían o no ser resueltos en 2018.
El asesinato de Peter Russo
La primera víctima de Frank Underwood en “House of Cards” ha sido, al parecer, olvidada; una muerte marcada como suicidio, cuando en realidad Underwood lo envenenó con monóxido de carbono.
El asesinato de Rachel Posner
Doug Stamper, quien la mató y enterró en medio de la nada, se responsabilizó a sí mismo de otro crimen. Como dijo Tom Hammerschmidt, aunque no puedan dar con el paradero de Rachel Posner (Rachel Brosnahan), ella existió. Ahora es cosa de la justicia reconocer su existencia.
El asesinato de Zoe Barnes
Posiblemente, la muerte más sorpresiva de toda la serie. Stamper está dispuesto a ir a prisión por este crimen, mientras que algunos ya rumorean que Frank Underwood fue el responsable directo de silenciar a Zoe (Kate Mara).
Ex presidente en la mira
La quinta temporada de “House of Cards” puso a Frank Underwood en la cuerda floja. Depende de su esposa, Claire Underwood, indultarlo para que no se convierta en el primer presidente norteamericano en ir a prisión. Lejos de la Casa Blanca, parece haberse quedado sin opciones.
El momento de Claire
Claire Underwood (Robin Wright) no es inocente, solo recordemos lo que hizo con Tom Yates. Ahora que es la líder del país, afrontaría el mismo reto en que Frank fracasó: mantener el poder.
Los titiriteros
Los Underwood dejaron que Mark Usher (Campbell Scott) y Jane Davis (Patricia Clarkson) ganaran demasiado poder en la Casa Blanca, al punto de ser indispensables. Ambos asesores han estado detrás de la caída de muchos y todo indica que, pase lo que pase con Claire y Frank, podrían seguir como si nada hubiera ocurrido.
El hombre que sabía demasiado
Doug Stamper (Michael Kelly) ha sido el servidor fiel de los Underwood por años. Ha matado por ellos y podría ir a la cárcel por ellos, pero no lo motiva solo el deseo de servir, sino de mitigar su propia culpabilidad por lo que hizo con Rachel. La sexta temporada podría mostrarlo como la pieza clave para tumbarse a los Underwood para siempre.