Las Lomas, residencial de “Al fondo hay sitio” que albergó durante ocho años a los Maldini y los Gonzales, ya es historia. Una vez concluidas las grabaciones de la teleserie, la escenografía fue desmantelada y los objetos de utilería, reciclados; con excepción de un retrato que el productor Efraín Aguilar rescató de entre los escombros para conservar como recuerdo.
Aguilar, además de ser el artífice de la producción de América TV, tuvo un papel relevante en la sintonizada ficción. Interpretó a Juan Gonzales, padre de Pepe (David Almandoz) y Lucho (Bruno Odar). Un humilde chofer de ómnibus que pierde la vida de un paro cardíaco. Tras ello, su retrato pasa a formar parte de la pintoresca decoración de la sala de los Gonzales.
“Mi personaje muere en el primer capítulo, pero su fotografía aparece colgada en la casa de los Gonzales durante toda la historia. Y esa foto me la llevé, la tengo ahora en la sala de mi casa”, comenta el productor, esbozando una pícara sonrisa.
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-“Al fondo hay sitio” llega a su fin siendo líder de sintonía. ¿Cómo asumes el cierre de este ciclo?Cada ciclo tiene algo de melancólico y triste cuando se acaba, pero a la vez es halagador saber que has marcado hitos que tienes que superar en la constancia de tu profesión, y este para mí es un hito bastante elevado. -¿Crees que era el momento ideal para su despedida?Soy un romántico, uno se encariña con el hijo menor y no quiere que crezca; pero dadas las circunstancias fue lo mejor. -¿Qué determinó su salida?Teníamos que trasladarnos a los nuevos estudios en Pachacámac, hubiese sido ilógico -desde el punto de vista económico- continuar. Era mejor iniciar una nueva ventura. Desde mi punto de vista ese tema fue decisivo, fue la sentencia de “Al fondo hay sitio”. -¿En qué crees radicó el histórico éxito de esta serie?Es el resultado de un buen trabajo en equipo, el cual, en su 80 por ciento, viene trabajando conmigo cerca de 16 años. Se ha logrado formar un equipo de producción tecnificado, especializado en este tipo de producciones, donde la prioridad es hacer un producto de calidad en poco tiempo. -¿Con qué personaje de “Al fondo hay sitio” te quedas?Para mí, dos fueron sensacionales. Y te cuento como anécdota, cuando le propuse a Irma Maury interpretar a doña Nelly, no le gustó. Me dijo: “Otra vez voy a hacer de vieja”, ja,ja,ja; pero después se enamoró del personaje. Algo parecido ocurrió con Adolfo (Chuiman), cuando se enteró que sería el mayordomo Peter, me dijo: “Efraín, tengo 40 años de actor y me vas a poner de mayordomo”. Luego, con el tiempo, me agradeció porque su papel fue casi protagónico.
-Karina Calmet alguna vez denunció que América TV no respetaba sus derechos laborales. ¿Se resolvió ese tema?Ese fue un tema personal de apreciación contractual en el cual yo no tengo absolutamente nada que ver. Ella ha grabado con nosotros hasta el último día. Sobre su contrato no puedo hablar porque no sé ni cuánto ganaba. -Christian Thorsen consideró una falta de respeto que le avisaras por teléfono que su personaje Raúl del Prado no iba más en la serie. ¿Conversaron después de eso?Me enteré que se sintió ofendido y lo lamento. Todavía no hemos conversado, pero cuando lo vea le voy a ofrecer disculpas, no fue intencional.
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-¿Sientes que se cometieron excesos en algunas escenas?Claro que sí, sobre todo en las escenas de chicas y tragos. Escenas poco aleccionadoras que tuvimos que frenar porque a nosotros nos ven niños, jóvenes y adultos. Cuando sentimos que esto ofendía un poco la sensibilidad de las personas, comenzamos a cambiar. -“Al fondo hay sitio” emite su último capítulo este lunes. ¿Quedaste satisfecho con el cierre que los guionistas le dieron a la historia?Cuando leí el guion del último capítulo me sorprendió, Gigio y su equipo son espectaculares. Creo que el público no lo va a soportar porque es muy fuerte, terrible; pero a la vez de gran intensidad dramática y humor negro. Esta final pasará a la historia como la mejor final de teleseries que he hecho. -¿Es verdad que un personaje muere y que los Maldini y los Gonzales terminan viviendo juntos?Todo eso se verá el día lunes, no puedo adelantar nada. La estrategia es que la primicia la tengamos nosotros. -¿Cómo se vivió el último día de grabaciones? ¿Cómo fue la despedida?Se juntaron una serie de emociones, hemos llorado y reído. En mi discurso de despedida, dije: “’Al fondo hay sitio’ ya es historia, pero la historia la hicieron ustedes al poner su talento al servicio de una producción que tenía a personas tecnificadas y confiables”. Agradecí también a la gerencia por haber apostado por nosotros, pues la teleserie no era un producto barato.
-¿Es la producción más cara de la televisión nacional?Eso te lo tendría que decir la gerencia. Hacer una producción diaria es más cara que cualquier otra, pero los resultados estaban a la vuelta del día. Era evidente que cada día teníamos la aceptación del público. Alguna vez escuché decir al gerente comercial de América TV que el motor del canal fue “Al fondo hay sitio” y “Así es la vida”. Eso es halagador. -En la preventa de América TV se presentó la propuesta del guionista Gigio Aranda para el 2017: “De vuelta al barrio”. ¿Integras ese equipo?Sigo trabajando para América TV, pero en ese proyecto no estoy. En realidad no sé qué me encargará la empresa. -¿Qué proyecto te gustaría emprender?Me gustaría seguir haciendo ficción, pero con ningún actor consagrado. Dudo mucho que la gerencia de América TV acepte algo así.
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EL DATOEfraín Aguilar inicia en enero un nuevo taller de actuación para niños jóvenes y adultos en el teatro Canout de Miraflores.
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