Nubeluz era un lugar mágico en el que cada hecho tenía un halo especial que maravillaba a los niños. Uno de los misterios que rondaba la cabeza de todos los nubetores era el contenido del cono que se le entregaba a los ganadores de los juegos.
Conseguir el famoso cono de Nubeluz no era para nada fácil: no solo había que conseguir pases al programa, sino también conseguir ser seleccionado para poder jugar en alguno de los retos. De ahí en adelante, todo consistía en ganar el juego.
Para todos aquellos que no logramos ganar uno, siempre quedó la duda de cuál era el contenido de los conos. Muchos, incluso, decían en medio de la fantasía de Nubeluz, que ahí se encontraba lo que uno deseara. La realidad, en cambio, se encuentra en foros de internet.
“Había chocolates, galletas, chicles y todo tipo de golosinas. Yo gané una vez pero para mi suerte no tenían conos (o sea, la envoltura) y me dieron una bolsa normal y me hicieron entrar a un cuarto repleto de golosinas, y llene mi bolsa con todo lo que quise. Recuerdo que era un cuarto pequeño pintado de celeste y blanco (como si fueran nubes), medio oscuro y con cajas de golosinas en todos lados”, cuenta un usuario de un foro que dice haber sido uno de los participantes de Nubeluz.
Sin embargo, para quienes siempre quisieron un cono de Nubeluz, hay una salida: basta con desearlo mucho y convertirse en un experto en manualidades. Acá dejamos un tutorial de cómo puedes hacer uno para rellenarlo con lo que desees.
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