Todas tenemos en nuestro armario ropa a la que le tenemos mucho cariño como para dejarla ir o que simplemente nunca nos hemos puesto y estamos esperando el momento para por fin lucirla. Pues seamos realistas, si no nos hemos puesto ninguna de esas piezas en los últimos, lo más probable es que nunca lo hagamos. Sabemos que deshacernos de la ropa no es fácil pero aquí te recordamos que tirarla a la basura no es la única alternativa. Al final del día, la moda también puede ser circular y darle una segunda vida es una excelente idea para empezar a reciclar tus prendas.
A continuación, te dejamos diez ideas más que sencillas que puedes incorporar en tus hábitos. Además, el planeta te lo agradecerá.
1. Reutilizar los tejidos para crear nuevas prendas
¿Sabías que a partir de una camiseta puedes obtener un bolso de uso diario para tus compras? Esto te permitirá reducir el consumo de bolsas de plástico y contribuir a cuidar del mo. Anímate a buscar un tutorial en YouTube o algún diseño que te inspire a crear una bolsa de tejido reciclado en pocos minutos.
2. Utiliza prendas que ya no usas para darle un toque original a tu look
Muchas veces descartamos diferentes prendas más por aburrimiento que por algún defecto o problema con talla. Ante la tentación de comprar una nueva prenda para lucir un look moderno, lo que puedes hacer es cambiarle los botones a tus prendas o modificar el corte de una falda o pantalón. Verás que será casi como tener una nueva pieza en tu armario.
3. Búscale un nuevo uso a tu ropa
Entre alteraciones y nuevos diseños, otra manera de reciclar la ropa usada es encontrándole una nueva función. Puedes empezar convirtiendo un sweater de mangas desgastadas en una falda perfecta para el invierno o transformando un blazer en un chaleco moderno.
4. Usa los retazos textiles para la limpieza de tu hogar
Proteger el ambiente puede empezar con algo tan pequeño como usar tu creatividad y encontrarle nuevos propósitos a tu ropa. Por ejemplo, una vieja camisa o polo puede resultar perfecto para limpiar tus ventanas o retirar el polvo de diferentes superficies. Si complementas esto con el uso de productos naturales como el vinagre o el bicarbonato, tu casa se mantendrá limpia y libre de tóxicos.
5. Dona la ropa que está casi como nueva
Ese vestido que te compraste para una ocasión especial o la ropa de los más pequeños suele quedarse casi impecable ya que a veces solo se llega a usar una vez. Donarla a centros de ayuda o intercambiarla con tus amistades y familiares es una buena opción para darle más vida a las prendas usadas.
6. Intercambiar ropa de segunda mano
Esta puede ser una buena excusa para socializar, probar nuevos estilos y darle un giro a tu guardarropa. Ya sea que lo hagas con tus amigas o visites tiendas de segunda mano, estarás reduciendo tu huella de carbono.
7. Aprovecha la tecnología para donar y vender ropa usada
Cada vez existen más espacios digitales para vender o intercambiar ropa. Desde piezas ‘vintage’ hasta ropa completamente nueva. Solo es cuestión de buscar.
8. Ponte creativa con las prendas que ya no usas
La ropa usada representa también puede convertirse en una oportunidad para desarrollar la creatividad. Para el ‘patchwork’ y diferentes manualidades las piezas antiguas o “pasadas de moda” pueden funcionar muy bien.
9. Contacta a organizaciones que necesiten ayuda
Las escuelas públicas, iglesias y centros médicos siempre recibirán con gusto prendas en buen estado que serán útiles para su comunidad. Ponte en contacto con estos centros y ofréceles ayuda a través de la moda.
10. Busca centros de acopio de ropa
Las posibilidades hoy en día son muchas cuando hablamos de reciclaje textil. Lo más común y accesible es identificar las tiendas departamentales o boutiques que brindan la opción de recibir prendas en desuso para ser convertidas en nuevas piezas.