La propuesta de matrimonio es un momento especial en la vida de toda pareja. Es el comienzo de su una historia que se quiere compartir con los hijos en años posteriores. Lee estas divertidas ideas para obtener algo realmente inolvidable y digno de contar, aprovechando que se acerca el Día de San Valentín.
1. El “acto final”
Puede parecer muy complicado, pero con los contactos necesarios es factible. Invítala al teatro y coordina previamente con el director y los actores para que, justo antes de que todos salgan a recibir el aplauso del público al terminar la obra, puedas hacerle la pregunta de rigor.
2. Al estilo cómic
Aquí requerirás de la ayuda de un caricaturista urbano, a quien puedes encontrar en diversos puntos de la ciudad. Pídele que primero bocetee una imagen de ustedes dos, cada uno con burbujas de diálogo. En la tuya escribirás “¿Quieres casarte conmigo?”; luego dile a tu pareja que escriba su respuesta. Con tan buena idea, lo más probable es que coloque un “¡Sí!”.
3. En medio de las nubes
Si están planeando viajar juntos dentro de poco, sorpréndela con la ayuda de las azafatas del vuelo usando el sistema de altavoces del avión. Esperemos que no te agarre ninguna turbulencia que rompa el encanto.
4. Un juego rápido
En una reunión con amigos, propón un juego de preguntas y respuestas rápidas. Con ellos como cómplices, deberás establecer como regla que la respuesta sea lo primero que se le ocurra. Luego de algunas rondas de preguntas tontas como “¿Cuál es tu color favorito?”, lánzate con aquella que tanto querías hacerle y espera pacientemente la respuesta.
5. Vamos a deletrear
Compra esas letras magnéticas para el refrigerador y ordénalas formando la pregunta de rigor, “¿Te casarías conmigo?”. Asegúrate que tu pareja no las vea y pónganse a hacer una actividad juntos. Luego de un rato, pídele amablemente que te alcance “algo de hielo” y síguela cautelosamente. ¡Se quedará helada!
6. A romperse la cabeza
Nada como un buen rompecabezas como cómplice. Hay diversas empresas que se dedican a crear estos juegos a partir de una fotografía o imagen personalizada. Solicita uno con algún paisaje natural (para no leventar sospechas) donde se pueda leer claramente tu propuesta de matrimonio. Pónganse a armarlo juntos hasta que tu pareja descubra la pregunta.
7. A lo “bella durmiente”
Espera pacientemente hasta que tu pareja se duerma profundamente. Una vez que te asegures de ello, colócale el anillo de compromiso con sumo cuidado. Trata de despertarte antes que ella para sorprenderla con una botella de champagne y puedas hacer la propuesta formalmente. Si se vuelve a dormir, no es una buena señal.
8. Su capítulo favorito
Adquiere alguna obra del autor favorito de tu pareja que sepas que aún no haya leído. Imprime un papel con tu propuesta y pégalo sutilmente en alguna página interior (asegúrate que sea en un capítulo inicial, si no deseas esperar mucho).
9. El anillo indicado
Hurga entre sus joyas favoritas que suele utilizar para el quehacer diario. Reemplaza alguno de sus anillos predilectos por aquel con el que quieres sellar el compromiso. Si escogiste el que más utiliza, pronto se dará cuenta del cambio que hiciste y te dará su respuesta.
10. El correo inesperado
Envíale una carta (al estilo tradicional, no un correo electrónico) a la dirección de su casa con un remite inventado para no levantar sospechas. En el interior, estará tu propuesta escrita a mano para darle un toque más personal.