En este video, el ingeniero biomédico Lawrence Bonassar, de la Universidad de Cornell, muestra el proceso vanguardista que ha desarrollado para reproducir implantes de orejas a partir de células vivas con ayuda de la tecnología de las impresoras de tercera dimensión (3D).
Puedes leer más sobre esta investigación en este enlace y revisar la traducción del video a continuación.
Mi nombre es Lawrence Bonassar y en mi laboratorio construimos orejas.
La invención que nosotros hemos descubierto es la manera de imprimir materiales con células vivas que pueden ser usados para reconstruir tejidos en el cuerpo. Mi laboratorio está interesado en la regeneración de cartílagos del cuerpo.
El proceso se inicia con el escaneado de la oreja. El paciente se sienta en una silla y tomamos fotografías de su oreja. Una cámara 3D gira en torno a la cabeza, registra imágenes tridimensionales y hace un mapeo topográfico preciso de la zona.
El próximo paso es clave: desarrollar el tipo de tinta para esta impresora. Esta podría llamarse “tinta viva” porque está compuesta de las células vivas provenientes del cuerpo del paciente. Las células están vivas tanto cuando se colocan en la impresora y como cuando salen de ella.
El gran potencial de esta técnica de impresión es que puede ser usada para generar órganos y tejidos difíciles de reconstruir. Se pueden implantar formas con espacios o colocar una célula al lado de la otra. Es decir podríamos ser capaces de crear hasta los órganos más complejos.
Los implantes que estamos haciendo no son de goma o de plástico, sino que están vivos. Crecen dentro del cuerpo y al cabo de dos meses se convierten en cartílagos; por ello no afectan al paciente ni le generan riesgos. El cuerpo acepta estos materiales como parte de su cuerpo, porque lo son.
Esto cambiará la forma, las condiciones y la práctica en la próxima generación de implantes. Mucho más cercana a los tejidos naturales que se han implantado al cuerpo por décadas.
Traducción: hrbrthlgn/a y a href="https://twitter.com/makatia/"makatia