Testigos presenciales en la zona siria de Guta Oriental han descrito síntomas y métodos de disparo propios de armas químicas en el ataque de esta mañana que causó varios cientos de muertos y otros cientos de heridos, según dijo hoy la organización Human Rights Watch (HRW).
La organización humanitaria afirmó en un comunicado que, si el Gobierno sirio no tiene nada que ver en el ataque, tal como afirma, debe dar acceso inmediato a la zona al equipo de la ONU de investigación de armas químicas que actualmente se encuentra en Damasco.
ASFIXIA, NÁUSEAS, CONVULSIONES Varios habitantes y médicos de la zona señalaron a HRW que cientos de personas, incluyendo muchos niños, murieron aparentemente asfixiados.
Un enorme número de personas de Guta han muerto, y los médicos y testigos describen detalles horribles de lo que parece un ataque con armas químicas, señaló en la nota el responsable para Oriente Medio de HRW, Joe Stork.
Los testigos señalaron que aparentemente resultaron afectadas varias poblaciones como Zamalka, Ayn Tarma y Moadamiya, y que creen que eran armas químicas transportadas por misiles lanzados desde zonas de la ciudad de Damasco controladas por el Gobierno, agrega el comunicado.
Dos médicos dijeron a HRW que los afectados padecían síntomas consistentes con la exposición a agentes nerviosos, como asfixia, problemas respiratorios, náuseas, convulsiones, mareos, salida de líquido de ojos y nariz, visión borrosa o pupilas rojas o dilatadas.
Los facultativos también dijeron que los servicios sanitarios de la zona se están quedando sin medicamentos para tratar estos síntomas.
MISIÓN DE LA ONU HRW insistió en que el Gobierno sirio debería dar a la misión de la ONU de expertos en armas químicas, que llegó a Damasco el pasado fin de semana e inició su trabajo el pasado lunes, acceso y cooperación plena a fin de determinar quién es el responsable del ataque.
Algunas ciudades de Guta Oriental, controladas por los rebeldes, están sitiadas por las fuerzas del régimen sirio desde comienzos de 2012, por lo que la organización humanitaria pidió al Gobierno de Damasco que permita inmediatamente la llegada de suministros de urgencia para socorrer al aproximado millón de personas que viven en la zona.